De qué me sirve.

Tendré que echarle un par de narices. Es una frase que me está torturando, pero quizás tenga razón. De que me sirve haber conseguido hablar con él, tener su número, una foto dedicada por él, incluso de qué me sirve ser ahora su mejor amiga. De qué me sirve si al hablar no pasamos de sus problemas, de qué me sirve enseñarle a tratar a una chica, de qué me sirve todo esto, si nada va dirigido a mi.
Quizás deba decirle algo.

Tendré que echarte a suertes, cara no volverte a ver, cruz quererte para siempre.

Paaaaasando.

Escribo esto mientras paseo por la calle de noche, pues algo ha cambiado desde que no me importa nada. Me siento... un poco más libre. Por ejemplo, no tengo que cuidar que estados pongo, ahora pongo lo que quiero, y punto. No tengo que tener cuidado con las fotos que subo, puesto que me da igual lo que piensen. Y lo más importante, no tengo que estar a todas horas mirando si se conecta la gente con la que quiero hablar, o no. La verdad es que eso ha sido lo que más ha cambiado. Desde que no estoy siempre pendiente de ello, tengo mucho más tiempo para todo. Tengo más tiempo para vestirme bien, peinarme bien y maquillarme bien, por lo que salgo mucho más mona a la calle. Tengo más tiempo para mi cuarto, por lo que me he creado mi propio baúl de los recuerdos, donde he leído cartas de hace años, y sí, reconozco que he llorado con ellas. Tengo más tiempo para escribir, cosa que me relaja, incluso he encontrado un nuevo hobbie, la fotografía, que me permite observar mucho mejor lo que me rodea. A mí siempre me ha gustado caminar sola, imaginándome y fantaseando una vida a su lado. Pues bien, ahora que nada me importa, puedo pasear mientras me fijo más en mi misma, por ejemplo, siempre pensando que me gustaba más el día que la noche, ahora descubro que no, que la noche es más romántica, bonita y mágica, y que la prefiero, al igual que ese gélido aliento del viento que sopla de vez en cuando. Pero pese a todo, me falta algo. Me faltas tú.

Es absurdo negar la realidad

Es inútil hacer creer que no nos conocemos, girarnos la cara cuando nos vemos, girarnos cuando creemos que nadie nos ve, buscar su sonrisa a escondidas. Es inútil enfadarnos una y mil veces por errores del otro, pensar que tú dejarás de ser tan putón porque yo te lo pida, que yo tomaré la iniciativa porque tú me lo pidas. Es inútil pensar que no tenemos probabilidad de acabar bien. ¿Te soy sincera? ¡Hasta el puto horóscopo dice que lo nuestro no puede ser! Pero yo sé que es mentira joder, que algo que dura tanto no puede acabar, que pienso en ti cuando miro a otros, que piensas en mi cuando crees que puede pasar algo con otras.
Que no, que no, que no, que tú eres para mi, y yo para ti.

Deja tu estúpido cigarro y ámame.

Morimos por cada palabra sin temerle a nada.

Tantas veces que la gente me ha preguntado qué soy yo. Me vestía con tacón y de Bershka, por lo que me preguntaron si era pija. Respondí que no. Me metía en follones, por lo que me preguntaron si era choni. Respondí que no. Escuchaba rap, por lo que me preguntaron si era rapera. Respondí que no. Llevaba colgado del cuello el símbolo de la paz, por lo que me preguntaron si era hippie. Respondí que no. No. Me visto con tacón porque soy pequeña en un mundo de gigantes, me visto de Bershka porque tengo que estar mona para el príncipe azul que aún espero, pero con vestido de cola larga me tropiezo. Me meto en follones porque no me dejo manipular ni me dejo ganar. Escucho rap porque habla de la realidad. Llevo colgado el símbolo de la paz, porque creo en ella. Pero ni soy pija, ni choni, ni rapera, ni hippie.
Simplemente soy yo, ¡Joder!

Eh caramelo, me gusta tu pelo

Creo haber entendido por fin por qué llevo meses sin lograr olvidarme de ti. Es porque nuestro amor es tan fácil, y difícil a la vez. Es fácil, porque ambos sabemos que estamos interesados el uno en el otro, porque sabemos que aunque nos ignoremos en persona, sonreímos a escondidas al vernos, porque sabemos que un encaprichamiento cualquiera no puede durarnos tantos meses. Es tan difícil, porque nadie cree que pueda ser real, creo que ni siquiera lo crees tú, porque somos tan diferentes, porque yo siempre he buscado el amor verdadero y tú sólo un revolcón, porque yo tengo que tragarme el orgullo y tú soportar mi impaciencia. Quizás esto no se apague porque al fin y al cabo no queremos que acabe, sufrimos y nos alegramos por igual, es verdad que yo he soltado muchas lágrimas pero también muchas risas. Quizás esto no se apague porque pese a durar tanto nunca llega a ser rutina, siempre conseguimos sorprendernos el uno al otro. Yo he llegado a descubrir tu lado más friki e infantil, tú has llegado a descubrir mi lado más caprichoso y romántico, pese a que tu siempre te las has dado de atleta maduro y yo de pasota espontánea.

Pues sí

Esos instantes en los que realmente piensas que los tíos o son bipolares o tienen la regla 1 vez por semana.

Chorradas de horóscopo

Todo está en nuestra contra. Pero todo, todo. Hasta el maldito horóscopo, que dice que nuestros signos no pueden estar juntos. Que yo busco una relación casi de por vida y tú eres un rompecorazones. La verdad, esas chorradas de horóscopo nunca me han caído bien. Pero, no sé...
Quizás no debamos estar.
O quizás debamos luchar.

Bella Durmiente.

Y tirada en la cama con colcha de marca, una amiga borracha y la otra al teléfono, rayando aún así con tu voz, y es que no sabes lo que es cambiar de humor dependiendo de tu humor. No sé qué hacer no se me ocurre, sólo quiero escapar de aquí o meterme en un sueño de esos en plan Bella Durmiente, de esos que no te despiertas hasta que no viene el príncipe azul. Aunque no sé si quiero. No sé, la verdad, aunque no eres mi concepto de príncipe azul, para mi corazón lo eres. Es difícil de explicar, fácil de sentir.

¡ Te amo, te amo, te amo !

Bastante gente.

No sé, ni tengo ganas de contar, cuanta gente hay en el mundo. Pero hay bastante. Hay bastante gente en el mundo, en mi continente, en mi país, incluso hay bastante gente en mi ciudad. Entonces, me sigo preguntando, por qué, si hay bastante gente, mi corazón te eligió a ti. Quizás es porque eres el más guapo, majo, listo, romántico, agradable y gracioso de mi ciudad, de mi país, de mi continente y de mi mundo. O quizás no. O quizás es que sólo seas todo eso para mi, y para el resto de la gente no.
Quizás sólo yo te encuentre perfecto.
Quizás... solo quizás... esté enamorada.

Que suba suba, la temperatura, que la noche está buena para hacer travesuras (8)

¡Tenía que decirlo! Si no reviento.

Gente, tenía que decir que cuando nos pasamos dos horas mirando a esa persona en el chat pensando si hablarle o no, en el fondo deseamos que sea ella la que inicie conversación y nos quite el marrón. TQD

Si te vieras con los ojos que te veo no conocerías el complejo

No sé si me gusta o no esa sensación de despertarte por la mañana y pensar que quizás lo veas. No sé si me gusta salir de clase con la esperanza de que pases. No sé si me gusta sonreír cuando te observo reír. No sé si me gusta buscarte en el chat, abrir tu ventana y esperas a que hables. Por supuesto, soy más débil, así que siempre acabo abriendo conversación yo.
No sé si me gusta quererte.

Hay que amar despacio para conservar el amor, odiar rápido para quemar el rencor, y es que, hay sentimientos que avanzan en espiral, no? así tardan más en traspasar el corazón.

Paseo por las huellas que dejan tus zapatos.

-¿Qué tal?
+Mal.
-¿Por?
+Necesito dormir.
-Ah, y yo necesito felicidad.
+Yo necesito que me las des tú.

Tal y como tu eres

Eres... eres bipolar. Te deprimes con bastante facilidad y te levantas también con mucha facilidad. Eres friki. Te pasas la tarde enganchado a un vídeojuego y te sabes los nombres de varios superheroes. Eres una extraña mezcla entre maduro e inmaduro. Hablas de la actualidad y la sociedad con una madurez infinita, pero a la hora de solucionar un problema, eres como un crío. Te rayas por cosas sin sentido, y a las cosas verdaderamente importantes no les das importancia. Pese a tu exterior de jugador de fútbol, pasas las horas libres leyendo libros. Eres un putón idiota, pero es porque tienes miedo a morir solo y porque te gusta sentirte amado, por lo que te gusta enamorar a las chicas con palabras bonitas. Aunque cuando no tienes a la gente delante eres muy sociable, encantador e incluso un poco salido, en persona eres tímido, callado y pasas mucho desapercibido. Te tomas los estudios mucho más en serio de lo que aparentas. Detestas a los canis y a las chonis. No, no eres un chulito, no hace falta que te hagas fotos sin camiseta marcando abdominal, tú y yo sabemos que no eres así. ¿Te das cuenta? Yo te conozco mucho mejor que mucha gente. Yo sé cómo eres en realidad, y te quiero, con tu verdadera forma de ser. Y lo sabes.

¡ Ostttttttt...ras !

Conozco dos personas que han sido capaces de hacer que yo me tragara el orgullo alguna vez. Tú eres una de ellas, y te puedes sentir importante. ¿Importante? Para mi fuiste más que importante. Para mi lo fuiste todo. Simplemente un día decidiste irte... sin embargo, yo seguí intentándolo. Seguí intentando hablarte, ayudarte, hacerte sonreír, hacerte feliz, pese a que tú me utilizaste, me jodiste el corazón y me tiraste a la basura. Me abriste de nuevo la puerta. Todo fue bien, cuanto, ¿2 semanas? Lo que tardaste en volver a enamorarme, o quizás abrirme la herida de nuevo, ya que de verdad que creo que nunca te olvidé. Y me volviste a joder el corazón, y me volviste a tirar. Ha pasado de ello más o menos un mes. ¿Sabes qué estoy haciendo ahora? Darte otra oportunidad. Soy idiota.

Ey, adoro tu caminar, tu pasito al rodar, tu piel sobre mi piel, tus ojos verde mar. 

Buenas noches... mmm, buenos días.

Y cada mañana me despierto con el mismo sentimiento de, ¿Para qué me despierto si hoy no te voy a ver? Es esa sensación de vacío, de querer irte a dormir ya porque sabes que no harás nada productivo, aunque con nada productivo simplemente me refiera a oír tu voz. La verdad es que era un poco más fácil antes, no sé, sufría mucho con aquel putón, pero cada mañana me despertaba con la ilusión de verlo...

Pero bueno, habrá que apechugar con lo que nos toca.

Buenas noches, mmm digo Buenos días. 

¿Acaso ella... puede darte entero el corazón, como lo estoy haciendo yo?

¿Sabes todo lo que haría por ti, verdad? Por ti aguantaría todos los días a gente que no me cae bien. Por ti iría a sitios que de normal no iría nunca. Por ti racionaría el tiempo que tengo, para estar mitad contigo mitad con mis mejores amigas, cosa que no había hecho nunca. Por ti me pasaría una tarde entera simplemente preguntándote cosas tontas. Por ti sonreiría cada día aunque todo me fuera mal. Por ti gastaría todo el saldo de mi móvil en el momento que me hicieras una simple perdida. Por ti me llevaría bien con tu ex, porque sé que eso te hace feliz. Todo eso lo haría por ti. Ah, no, perdona, que es que todo eso ya lo he hecho por ti. Y, ¿sabes lo que has hecho tú por mi? Conseguir novia. Y la verdad no tengo nada en contra, aguantaré con toda mi paciencia como dices que la amas, que lo pasas mal cuando no la ves, que sólo buscas sus besos. Aguantaré todo eso y más, y te seguiré esperando. Pero entiende que no me quepa en la cabeza qué tiene ella, qué hace ella para hacerte tan feliz, que no haga yo. ¿Acaso ella ha escuchado cada una de tus rayadas? ¿Acaso ella te ha hecho compañía mientras esperabas el bus en plena noche? ¿Acaso ella... puede darte entero el corazón, como lo estoy haciendo yo?

;$

¿Qué es lo que tiene ella que no tenga yo?

Eres algo nuevo en mi vida, pero, ¿qué quieres que te diga? Me gustas más.

La verdad es que, si algo he aprendido estos últimos días, es que no puedes conformarte con poco, y menos si hablamos de amor. No podemos conformarnos con el típico buenorro rubio de ojos azules, pero que en realidad es un capullo, sí, de esos que se creen príncipes azules y no llegan a pitufo... Hay que tirar a lo alto, y repito que no hablo de físico, hay que tirar a lo alto de personalidad. Hasta hace un tiempo yo era de esas que se pillaban por putones que bueno, le dicen cosas bonitas, pero no sienten lo que dicen de verdad. Son como robots, se aprenden cuatro palabras de memoria con las que las tías caemos rendidas, pero no sienten lo que dicen. Hasta hace un tiempo yo era de esas. Hasta que te conocí a ti. Tímido, experto en pasar desapercibido, y bastante callado, pero con un corazón de oro, preocupándote por la gente, asegurándome que estarás aquí si me pasa algo, dándome un voto de confianza. Eres algo nuevo en mi vida, pero, ¿qué quieres que te diga? Me gustas más.

Eh, amor, ¿dónde coño estás?

Hay quien llama obsesión a buscar cada dos minutos si se ha conectado, a revisar todas sus fotos cada día, a tener a sus amigas catalogadas en ''sólo amigas'' y ''zorras que le tiran la caña''. Hay quien le llama locura a buscar su mirada entre los pasillos, a sonreír sólo con verlo, a tentar a la suerte una vez más cada sábado, arreglándote un poquito más de lo normal, por si te lo encuentras. Y hay quien llama amor a... mm, ¿a qué? Si todo lo que se supone que significa estar enamorada lo llaman locura u obsesión. En tal caso, eh, señor amor, ¿Dónde coño estás?

Ellos.

Su forma de ligar es meterse contigo. ¿Su mejor arma? Imitar tu voz, haciéndola mas aguda y chillona. Se muestran valientes ante ti, aunque no lo sean, ya que nunca se meteran con otro si no tiene a sus amigos detrás. Les encanta soltar cosas subidas de tono cuando no deben. Una tarde aburrida se arregla con la consola. Es increíble la capacidad que tienen de no entender ninguna indirecta, yo es que empiezo a pensar que lo hacen queriendo. Qué felices pueden ser hablando entre ellos de los trucos de su videojuego favorito. ¿Joder? su mayor aficción. Si algo te jode, y más si les gustas, lo harán una y otra vez. Son estúpidos por naturaleza, se ríen de cosas absurdas, se putean entre ellos, se dan de ostias y luego tan amigos. Son raros, extraños, especiales, únicos. Son gilipollas, subnormales, idiotas y capullos. Pero, pese a todo, uno de ellos es la vida de cada una de las chicas.

Trampa

Si sonríes y no te devuelven la sonrisa, grita ¡trampa!
Si pasas con tus libros delante del guaperas del instituto y no se te caen los libros, grita ¡trampa!
Cuando veas a un amigo llorar, grita ¡trampa!
Cuando el chico que te gusta esté con otra, grita ¡trampa!
Si la punta del lápiz se te rompe, grita ¡trampa!
Si consigues acabar una goma de borrar, grita ¡trampa!
Si no paras el microondas en el segundo 1, grita ¡trampa!
Si estás enamorada, grita ¡trampa!
Y si no sonríes, grita ¡trampa! Hasta que la vida te cambie la suerte.
No se puede llevar un as en la manga si siempre vas de tirantes.

Sí, no

No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.Te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.Te amo.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero.No te quiero. ¡ ERES MI VIDA !

Y así, y así, y así

Y así la princesa se enamoró del ladrón. Y así la víctima se enamoró del asesino. Y así la oveja se enamoró del carnicero. Y así la niña se enamoró del asaltacunas. Y así la alumna se enamoró del profesor. Y así el pez se enamoró del tiburón.
Ninguno es mi caso, pero todos son amores prohibidos, donde uno de la pareja acaba mal.
Y así yo me enamoré de ti.
Adivina quién acabará mal de esta pareja.

Pequeño gran niño.

¿Soy a la única que le ha pasado alguna vez que cuando cierra los ojos lo ve a él? ¿Que se arregla un poco más los sábados por si lo ve? ¿Que está deseando que lleguen las clases para verle? ¿Que se enamoró por una  sonrisa y no por un cuerpo? ¿Que no le importan sus defectos? ¿Que es feliz incluso cuando descubre un poquito de su vida, porque así se siente más cerca? ¿Que sonríe cuando lo nombran, y que no para de hablar de él? ¿Que se pone enferma cuando se pone un estado de amor sabiendo que no va por ella? Decidme que no estoy sola...
T e q u i e r o pequeño gran niño.

Mejor Amiga, te adoro.

La verdad, me he planteado muchas veces qué es lo que a una amiga, la distingue de las demás, para que sea '' la mejor ''. Y he llegado a varias conclusiones. Tu mejor amiga es aquella que te jode, te manda al frente, te grita, se mete en tus conversaciones, te deja en ridículo delante del chico que te gusta, y encima se ríe. Pero también es aquella que aguanta tus malos días sin decir nada, la que hace de almohada limpiándote las lágrimas, la que hace de diario, le puedes contar todo y no dice nada, la que hace de madre, te dice lo que te conviene y lo que no, la que hace, en general, de mejor amiga. Aquella que, cuando le prestas una cosa, te la devuelve, con suerte, al cabo de dos meses, la que cuando te caes, se ríe, la que se mete con tus defectos, pero no sabes por qué, nunca te lo tomas a mal. Bueno sí que lo sabes, porque tú le haces lo mismo. Y porque ella es también aquella que si alguien te deja de hablar, no te deja de hablar, sino que dice '' pues menudo gilipollas '' con cara de asco, la que pone verde al tío que te gusta pero que te hace daño, la que está a tu lado día sí día también, la que se metería a defenderte de cualquiera, con la que puedes pensar en voz alta, porque digas lo que digas o hagas lo que hagas nunca te juzgará.
En resumen, es tu mejor amiga.

La historia de mi vida

Ella es una niña de papá, con el corazón nuevo, no había cumplido los 15 aún. Su vida era feliz, sonreía por todo, era una niña como otra cualquiera, bueno, sinceramente, eras más monjita que las demás, apenas se maquillaba, era inocente, dulce y nunca borde. Un día se tropezó en la vida, alguien la ayudó a pararse y allí fue donde lo conoció. Él tiene ya 16, es alto y muy amable, es un príncipe azul, muy atento y agradable, un joven muy valioso. Un tiempo más tarde ella se sentía de lo mejor, el chico la protegía y le daba todo su amor, y así fue, mes tras mes, enamorándose de él, sin temer ni una vez lo que podía suceder. Ella sentía que lo amaba y que él la amaba de verdad, y le dio su corazón, junto a su libertad.
-Mañana continúo con la historia de mi vida.

Dream it.

Cuando tengas que tomar una decisión difícil, tira una moneda al aire. ¿Por qué? Porque, mientras la moneda esté en el aire, de repente, sabrás que es lo que esperas que marque la moneda.

Rutina.

Llevaba ya dos horas. No se conectaba, pero tú te morías por hablar con él. Así que seguías esperando, esperando, siempre esperando. Te sabías sus horarios de memoria, ¡tiene que conectarse ya! Y lo hace. Siguiendo su rito, lo hace. Él se ha conectado. Haces lo de siempre, abres su ventana, la minimizas y esperas. Te llaman a comer. Joder, qué oportunos, ¿verdad? Pero vas, comes a toda ostia, con el cacho de pan todavía en la boca vuelves. Él sigue ahí. Menos mal. Continúas esperando. Y entonces, se va. Es hora de llorar pequeña, es hora de llorar... porque hoy no te ha hablado, hoy para él no has existido, hoy no se ha acordado de ti. Y lloras amargamente, hundiéndote en un mar de lágrimas. Y así pasas 10 minutos, entre lágrimas y ojos rojos, hasta que otra vez vuelve. Tus lágrimas se calman, tus ojos vuelven a su color normal. Pasa un rato, sigue sin hablarte, pero ya no te importa tanto, porque está ahí... Hasta que oyes el sonido de cuando alguien te habla. Ni abres la página, porque será otro pesado aburrido. Pero el nombre aparece en la barra de tareas. Es él. Y para qué continuar la historia, si ya se sabe lo que pasará, te hablará, serás feliz, se irá y volverás a llorar. Y así todos los días...

Pues ya ves

¿Yo? Yo no soy ni rubia ni morena, soy castaña, pero me gusta serlo. Me gustan los tacones pero también las zapatillas, y lo mismo pasa con los vestidos, las faldas y los pantalones. Me encanta la noche aunque disfruto más del día, bailo, a veces sin ritmo, y canto, a veces desafinando. Sí, soy bajita, enana, y todo lo que quieras llamarme, pero con un poco de tacón estaría a tu altura, e igualmente, las ostias sea alta o bajita te las puedo dar igual. Soy desordenada, mucho, no sé cuidar cosas materiales, pero a las personas las cuido mejor que nadie. También me puedes considerar sobrada pero es que estoy harta de niñatas que dicen estar gordas para dar pena, soy bipolar, un día sonrío y al otro lloro. Pero también soy de aquellas que saben dejar mal a la primera chulita que se le ponga en frente, me gusta andar en calcetines, y lo admito, alguna vez fui de aquellas que se arreglaban a más no poder para ir a tirar la basura. Y sin olvidar que a día de hoy, sigo siendo igual, te supero a doble partida.

Y vuelven las lágrimas, el dolor y las noches pensando en él.

Si nunca os ha pasado, no sabéis lo que jode haberte estado meses intentando olvidar a alguien, y que ese amor escondido resurja con solo una mirada, una sonrisa o una simple conversación. Entonces entiendes que nunca lo olvidaste, simplemente lo echaste atrás en tus prioridades hasta parecer que no le recordabas, pero tu subconsciente siempre miraba en la lista de conectados a su nombre, aunque no te dieras cuenta, y cuando estaba conectado, una extraña sensación te recorría el cuerpo, haciéndote quedar con cara de idiota, ¿Por qué? ¡Si está olvidado! No, no lo está. Y hoy vuelve a reclamar lo que es suyo, y vuelven las lágrimas, el dolor y las noches pensando en él.

Lección 2: No te compliques tanto, que ser romántico no es eso

-Hermanito, ¿Qué es estar enamorado?
+Es querer muchísimo a alguien, tanto que recorrerías el mundo por esa persona, tanto que te pondrías entre una bala y esa persona. Dime, ¿Cómo querrías que un niño te dijera que está enamorado de ti?
-Dándome una carta mientras hace una reverencia, y cuando yo la leyera que me diera una rosa, como los príncipes de las pelis.
+¿No crees que eso es pedir demasiado? Mira, ¿Sabes cómo veo yo la forma más bonita? Cambiando la carta por un mensaje privado de las redes sociales, la reverencia por un ''Hola princesa'' y cambiando la rosa por un beso, ¿no sería bonito?
-Pero eso es muy poco romántico...
+Ya, pero no nos gusta complicarnos demasiado.
-Quiero que un niño me diga que le gusto como tú me has dicho. ¿Tú lo has hecho alguna vez?
+Alguna, pequeña, alguna... pero eso te lo contaré otro día.

Es su pelo, son sus ojos, será su forma de mirar. Es un sueño, no despiertes, que la noche no puede acabar.

Es algo difícil de explicar. Digamos que me he cansado de los típicos tíos 10, esos guapísimos de ojos azules que en realidad son lo más cabrón que puedas encontrarte. Digamos que quiero un tío de lo más normal. Y... supongamos, que ese tío eres tú. El que empezó a caerme bien por su simpatía, siguió despertando mi curiosidad por su capacidad de sacarme una sonrisa con comentarios que en el momento justo, me hacían reír. Y digamos que me acabaste de gustar cuando te vi con tu amigo, el cual también es amigo mío, y mientras él hablaba, tú mirabas al suelo, avergonzado. Te quiero.

Lección 1: Barbie sólo es perfecta por fuera, por dentro sólo es plástico

- Hermanito, ¿Si somos buenos al morir vamos al cielo? -
+ No, si eres bueno solo serás una marioneta más entre la gente, y sufrirás, sufrirás mucho. Como en el amor. En el amor se sufre mucho, tú quizás aún no lo sepas, pero pronto lo verás. Te enamorarás del típico guaperas de ojos azules perfecto, pero no es perfecto pequeña, Ken es como Barbie, por fuera un físico perfecto, por dentro sólo es un cacho de plástico. Pero varias ostias después te darás cuenta de que el interior es más importante, entonces te encontrarás cabrones, que dicen ser románticos con una flor en la mano y luego verás que era una máscara. Al final, ya te dará igual, te quedarás pillada de cualquiera, y ese cualquiera, dañado también por el amor, se fijará en ti, que eres otra cualquiera, y seréis felices. -
- ¿Así se conocieron papá y mamá? -
+Así se conocen todos. Los que no se hayan conocido así, no es amor. Recuérdalo siempre niña, cuando te hundas por un idiota, sonríe y sigue adelante, porque con los ojos llenos de lágrimas no puedes ver esa cantidad de cualquieras que podrían hacerte feliz.

Perfect World a tu lado, o eso dicen

En un mundo perfecto... Las pegatinas se desprenden con facilidad. El hombre del tiempo siempre tiene razón. Los billetes muy arrugados son aceptados por las máquinas expendedoras. Las bolsas de patatas fritas están llenas del todo. Cuando escribes con rotulador la tinta no se traspasa. Siempre queda leche para los cereales. No se pierde un calcetín de la pareja. La punta del lapicero no se pierde mientras le sacas punta. Las páginas perforadas siguen la línea de puntos al rasgarlas. Todos los granos de palomitas explotan. La gente contesta a los SMS inmediatamente. Siempre tendrás un boli a mano.
Fuck you, mundo perfecto.

Esos días que le chillarías de todo a tu almohada, esos días que llorarías hasta ahogarme entre lágrimas. Esos días en los que pienso lo que pudo ser y no fue. Esos días que me obligo a mi misma a sonreír aunque no me apetezca, esos días que cuando me preguntan '' ¿Qué tal? '' me obligo a responder '' Muy bien '' cuando de bien tiene poco. Esos días que te quedarías fuera de cobertura, que no querrías haberte despertado, que te gustaría que te tragara la tierra, esos días donde no puedes seguir adelante por mucho que lo intentes, que te han hundido, que no puedes más.

Te Cu.

Te amo chavalín, pese a todo, pese a lo que diga la gente, pese a lo que se ponga en nuestro camino, te amo, pequeño estúpido.
Sí, yo también '' te cu '' , yo también TQ, o dicho mejor, yo también te quiero.

Historia de amor que en parte es cierta.

Él era alto para su edad. Ella, bajita para la suya. Él tenía que sacar defectos a la luz para llamar la atención. Ella, llamaba la atención por su amabilidad. Él no sacaba muy buenas notas, ella era de notables altos. Él escuchaba Metallica, ella escuchaba Lady Gaga. Mientras que él vestía de forma irregular y a menudo con ropa de grupos de rock, ella vestía de Bershka y similar. Él era el que se metía con la gente, mientras que ella era objeto de manipulaciones. A él lo veían como un friki. A ella como una muñeca con la que se puede jugar. Él era el típico metalero con pelo más o menos largo, ella la típica pijita.Eran opuestos. Eran diferentes, únicos, raros, especiales y distintos.
Pero se amaban.

Cuando alguien te llena del todo. Cuando alguien te saca una sonrisa con cualquier tontería. Cuando recuerdas cada una de sus palabras, del primer día al último. Cuando te has pasado noches soñando con su sonrisa. Cuando lo dejarías todo por verle. Cuando querrías pasar con él 2 veces al año una noche en Groenlandia, de esas que duran 6 meses. Cuando tu estado de ánimo cambia dependiendo del suyo. Cuando te vas a dormir contenta porque acabas de hablar con él. Cuando piensas en él a todas horas. Cuando te arrepientes de no haber aprovechado al máximo los momentos con él. Cuando le sigues recordando pese al tiempo. Cuando él es lo más lejano y lo mejor que te ha ocurrido.
Cuando lo amas, pese a la distancia.

Te liaste con una más fea que yo y eso que se vea.

Bueeno... venga, te haré un último favor. Pero el último, ¿vale? Voy a pensar en ti una vez más, mi amor... Como un cabrón, gilipollas. Como un estúpido cobarde. Te daría una ostia en toda la cara, pero solo conseguiría arreglartela. Sí, hemos tenido ratos felices, conversaciones, miradas, sonrisas... un puto engaño, eso era. No sé si tienes el máster en falso o qué, solo sé que te llego a comprar un detector de mentiras y explota. Vete de mi vida ostias, ya no eres nada para mi, si alguna vez fuiste algo para mi LO SIENTO yo ya me olvidé de ti.
~> Después de ser cabron, ¿la hija de puta con razon soy yo? " Que sí que estoy muy arrepentido maja " te arrepientes en tu casa mientras te matas a pajas cabrón, ¿ladrón de mi corazón? no creas, te liaste con una más fea que yo y eso que se vea. Mensajito al móvil que me quieres mucho CLARO, ya ni te contesto es más, me cambié de número falso.

Mejor que nada.

Mejor que despertarte antes de que suene el despertador y seguir durmiendo, mejor que tirarte en el sofá después de reventarte, mejor que encontrarte una moneda por la calle, mejor que estar en primera fila en el concierto de tu cantante preferido, mejor que pedir un Happy Meal siendo adulto, mejor que el sonido de la nieve cuando cruje a tus pies, mejor que buscar formas en las nubes, mejor que cuando aprietas los ojos y ves lucecitas, mejor que cuando pasaste de lápiz a bolígrafo, mejor que pasar un día entero en pijama, mejor que abrazar a un peluche, mejor que escuchar las conversaciones entre niños pequeños, mejor que comerse los lacasitos por colores. Mejor que ver una estrella fugaz y pedir un deseo. Mejor que la vida misma. Mejor que todo eso, eres tú.

Escribo en cada línea de mi diario tu nombre, y es que cuando pienso en ti no pasa el tiempo. Y es que cuando encuentras a la persona que te llena, la persona que te hace sonreír, la persona que ha hecho de cada noche de verano un sueño, te das cuenta de que es alguien... especial, único. No sé si es la media naranja de la que tantos hablan, pero a mi me llena de forma increíble, no sé. Aunque ahora que lo pienso, quizás sí que sea esa media naranja de la que hablan, porque dicen que puede estar en cualquier parte, y tú estás a cientos de kilómetros de mi. Y te echo de menos, muchísimo. Y te quiero, te extraño, también muchísimo. Esas miradas enamoradas de niño pequeño a la luz de la luna,  esas sonrisas de media noche, esos ''hasta mañana'' que me sacaban mi lado más tierno, porque sabía que te volvería a ver. Esas mañanas medio dormidas que me despertaban al ver tu cara de niño. Esos piques tontos entre nosotros, esos ''me voy a enfadar de verdad'' que decía con una sonrisa. Esas miradas a escondidas. Esas tonterías nuestras que nadie entendía. Esos días y esas noches de tu lado. Todo ello me ha hecho darme cuenta de que te esperaré, todo el tiempo que haga falta. Te quiero, no me importa la distancia, yo te lo diré las veces que haga falta si me dejas.

Es pensar en los kilómetros y las lágrimas saltan

-Dame lo que sea más valioso para ti.

+¿Por qué?

-Para llevármelo conmigo y que tengas que venir a buscarlo a mi ciudad. Entonces, allí, no te dejaré marchar. 

+Será difícil no dejarme marchar...

-Llamará a la policía, a los bomberos, a la ambulancia, a lo que haga falta, pero si vienes, te prometo que nunca jamás saldrás...

+Tu tampoco saldrás nunca.

-¿De dónde?

+De mi corazón, pedazo de idiota. Dicen que la distancia es el olvido pero... contra más distancia yo más siento que te quiero.

-¿Me amarás siempre?

+Siempre.

-¿Darías por mi tu vida? 

+¡No! Porque mi vida eres tú, y no te doy por nada...

Amores de verano y otras tonterías.

Recuerdo que desde pequeñita me contaron que lo peor son los amores de verano, esos que son correspondidos pero la distancia los separa. Yo nunca entendí cómo alguien puede amar a otro que vive a cientos de kilómetros de ti, hoy sí. No sé como explicarlo, y es que cada vez que pienso en todo el terreno que nos separa se me saltan las lágrimas, no quiero que le des tus besos de niño a otra, es que sufro sólo de pensarlo... Me ha encantado todo este tiempo a tu lado, todas esas risas y esas miradas enamoradas, y es que puede pasar el tiempo que yo en ti seguiré pensando...

Pasear enamorados por el parque.

No me importa cuántas tías te vayan detrás, no me importa lo que hiciste hoy, no me importa nada de eso. A mí lo que me gusta es que, pese a que todas las tías del mundo te vayan detrás, me abras conversación a mí, a mí lo que me gusta es, que aunque salgas con tus amigos muy lejos de donde estoy yo, sigas pensando en mí. A mí lo que me importa es pasarlo bien, pasear enamorados por el parque, a mí lo que me gusta es ponerte a cien con mi cara de niña y mis buenos modales.

Las mujeres se enamoran de lo que oyen y los hombres de lo que ven. Por eso las mujeres se maquillan y los hombres mienten.

Cuando el corazón no se acelera a un ritmo constante, cuando una sonrisa no es más que un triste garabato curvado, cuando las lágrimas no son de emoción, cuando se crean incómodos silencios que yo he de romper, porque a ti ni se te ocurre hacerlo, cuando llevas más de dos días sin hablar con esa persona, cuando te mueres por dentro, cuando todo ya no es tan bonito como el primer día... Despierta, esto ya no es amor.

Yo también me quiero

+Siempre he pensado que eres un arrogante y un creído
-Lo sé
+Pero te quiero.
-Sí, eso también lo sé
+¿Cómo que lo sabes?
-¡Yo también me quiero!
+¡Eres idiota!
-Mi próxima novia me ha llamado idiota. No sé como vivir con ello.
+¿Tu próxima novia?
-¡Claro! Tenemos mucho en común, por ejemplo, tú me quieres, ¡y yo también me quiero! ¿Por qué no salir contigo?
+Eres demasiado creído...
-No te lo tomes así, tú te has enamorado de un idiota y un creído, yo me he enamorado de una chica que sólo sabe llamarme idiota y creído. Creo que estamos en situaciones parecidas.

Somos

Somos estúpidos, nos caemos con la misma piedra. Somos egoístas, lo queremos todo para nosotros. Somos nocturnos, disfrutamos más de la noche que del día. Somos masoquistas, hacemos lo que sabemos que nos va a doler, como enamorarnos. Somos crueles, sobretodo para conseguir lo que queremos. Somos inmaduros, no aprendemos ni a palos. Somos imprudentes, hacemos lo primero que se nos viene a la cabeza sin pensar en las consecuencias. Somos exagerados, sobretodo contando la dificultad del último examen. Somos ridículos, arrogantes, ignorantes. Pero tenemos razón.

No queremos canciones que digan que nos sobra el amor.

Y me quieres decir, después de todo lo que me has hecho pasar, que ahora ya no le haces caso a esa chica que dio tanto como yo por ti, y que ahora que yo paso de ti porque he encontrado gente mejor me vienes detrás?

;)

Quiero que entiendas que aunque te he amado como a ninguno, lo he dado todo por ti, siempre te he intentado hacer feliz, pero me he cansado de ser el puto segundo plato, que me utilices, que me hables cuando te interesa, en fin, me he cansado de ti. Por eso, aunque te quiera, ya no te necesito, hay muchísimos tíos mejores que tú. Y, ¿sabes por qué estoy sonriendo ahora? Porque me encanta ver como yo cierro tu ventana de conversación mientras tú la abres, desesperado.
PD: tú tendrás a muchas tías detrás, pero como el buenorro que tengo yo, nadie! JODETE.

Enfin.

No le gustaba su forma de ser. No le gustaba el estar siempre pendiente de una persona u otra, ni de tener qe depender de lo qe los demás pensaban. Tampoco le gustaba tener qe opinar sobre problemas ajenos, meterse en lios también ajenos, no le gustaba tener qe estar siempre andando de héroe y no recibir nunca nada. Y quizás suene egoísta.  Pero no lo era. A nadie le gusta ayudar y qe no le ayuden. Pero seguia con su forma de ser .

Hoy ya no confía en nadie. Prefiere guardarse sus cosas en el fondo de su corazón aunque, sabe qe eso no es bueno. Pero no tiene alternativa cuando se siente uno tan solo.

¿Tú y yo hemos salido alguna vez?

-Oye...
+Dime.
-¿Tú y yo hemos salido alguna vez?
+No.
-Anda... ¿Y eso?
+¡Nunca te había visto antes!
-¿No? Deberíamos tentar a la suerte y volver a encontrarnos. También deberíamos salir. Hay una primera vez para todo, ¿no?

Empiezas a darte cuenta de que quizás lo estés superando cuando te desconectas antes que él. Vuelves a caer en la trampa cuando al volverte a conectar, buscas su nombre, abres la ventana y la dejas ahí, a la espera de que él te hable.

Cambios, cambios, cambios

Y si te soy sincera, me he dado cuenta de que hay cosas que nunca cambian. En toda película de miedo tiene que aparecer una muñeca siniestra con sonrisa espeluznante, en toda película de acción el prota tiene que estar buenorro. Si tienes un plan 10, lloverá, si quieres ir a la piscina hará aire. Cuando pase el tío de tus sueños alguno de los dos hará el ridículo, tu mejor amigo siempre se descojonará vivo de ti. Tu mejor amiga siempre te hará hacer cosas que nunca harías, te empujará hacia la persona que te gusta y luego dirá que ''fue un accidente''. Si vas a la disco y ponen tu canción favorita, la bailarás hasta cansarte junto a tu gente, hasta que te empujen y te tiren la bebida. Un buen día nunca lo estropea ningún capullo. Una sonrisa puede contigo. Las cosas nunca cambian. Te quiero. Eso tampoco ha cambiado.

.

¿Y si hubiera llegado la hora de buscarte a otro? Él no te quiere, sólo está jugando entiéndelo, abre los ojos y mira más allá de lo que quieres ver. No te es sincero cuando te dice que te quiere, nunca ha sentido nada, sólo quiere no estar solo y solo no estará por tu culpa. No le des oportunidades, olvídale. Intento olvidarte, pero es que no sé si quiero. Es obvio que esto no llega a ninguna parte, pero me haces tan feliz diciendo mentiras...

Si sonreir cuando el corazón se muere es de valientes, pido la medalla. Me gustaría chillar, darle patadas a algo, o mejor, romperte la cara, pero me tengo que conformar con las lágrimas y los ojos enrojecidos. Y es que me lo avisaron, me lo dijeron, no te conviene, te hará daño... Pero el corazón me tapó los oídos para no poder oirles. Y aquí estoy otra vez, misma piedra, mismo bache en el camino que no me deja continuar, mismo mundo color rosa que se convierte en negro en menos que canta un gallo.

Aprendí a amar a quien no tengo que amar, aprendí que jugar con fuego hace daño, aprendí a llorar hasta ahogarme en un mar de lágrimas, aprendí a tener en cuenta los pequeños detalles, aprendí que soy demasiado inocente para este mundo, aprendí a querer lo que tengo y no lo que espero, aprendí a aprovechar las oportunidades, aprendí a pensar sólo en el presente sin pensar si en el futuro la decisión me hará daño, aprendí que arriesgarse es bueno, si no te caes por una cosa te caerás por otra, aprendí a reír en soledad, aprendí a dar la cara, aprendí a no dar explicaciones, tus amigos no las necesitan y tus enemigos no las creen, aprendí a cantar para espantar a las malas rachas, aprendí a sufrir en esta vida, aprendí a caer, pero no aprendí a olvidar.

...

Ya no me quedan lágrimas, sólo me queda gritar.
F _ _ I C I D A D. Sólo me falta ÉL.

¿Hola, hay alguien?

¿Hola? Llamo a tu cerebro, a tu conciencia, a tu... ¡Lo que sea, pero algo que esté situado en tu cabeza! Porque veo que el corazón poco lo usas y no sé... tu p**** siempre hará lo que le venga en gana sin escuchar nada. Sí, hola, estás hablando con la chica que lo ha dado todo por ti, que se preocupa por ti, que te escucha todo lo que tengas que decir, que te quiere como eres, sí, esa que luego no tienes en cuenta. ¿Que si lo hago porque quiero? No, no no. Lo hago porque estoy enamorada tonto, sí, has oído bien, que sí, que estoy enamorada. De tu sonrisa, de tus palabras, de tus ojos, yo que sé... de ti. De tus halagos que me lanzas de vez en cuando, que me hacen estar en las nubes, aunque sé que en el mismo instante le tiras los tejos a otra yo sigo aquí. Quiero que sepas que puedes salir con todas, liarte con todas, lo que quieras, pero ninguna te va a querer más que yo, así que no entiendo por qué juegas así conmigo. No sé, yo tengo un tío que hace por mi lo que yo hago por ti y caigo a sus brazos, eh. Pero no sé, tu eres distinto. Sí, distinto, especial, raro, como quieras. Y tonto. Ah sí, muy, muy tonto. Pero te quiero, con tus gilipolleces. Pero no te das cuenta, estás demasiado ocupado enrollándote con otra. Aunque yo sigo aquí...

¡Tonto!

- ¿Cómo consigues esa deslumbrante sonrisa siempre?

+ Es sencillo, crea una balanza, pon a la derecha los momentos buenos que has pasado y a la izquierda los malos.

- Pero... ¿Y si la izquierda gana a la derecha?

+ No importa, tan solo... ¡Haz trampas!

Me duele.

Me duele cada vez que te conectas y no saludas. Me duele que cuando yo te salude, no hables. Me duele que si hablas es solo para decir cosas malas. Me duele que te vea por la calle y tenga que girar la cabeza, por temor a que me veas roja. Me duele oir decir a mis amigas que no eres bueno. Me duele cuando me dicen que te olvide. Me duele cuando sé que no me dirijes la palabra porque estás hablando con otra. Me duele que hayas probado tantos labios y sin embargo no sepas que significa el amor. Me duele que simplemente, no tengas corazón. Me duele que me engañes con tus palabras vacías. Me duele estar enamorada, de ti. Me duele todo esto, y mucho más.
Me duele quererte.

La tensión la causa el amor.

¿Quién es esa zorra que le habla? ¿Y esa gilipollas que le sonríe? Espera... ¿esa puta le está abrazando? Parece los típicos pensamientos de una celosa, y en cierto modo lo son, porque son los míos. Pero quiero que entiendas que si me pongo así de celosa es porque siento algo, ¿entiendes?  Pero tú no te das cuenta, en realidad, en la mayoría de las ocasiones no te das cuenta de que estoy, pese a que haga lo posible para que lo veas.

Dulce inocencia.

Un niño me dijo que ''amor'' era cuando tu mascota te recibe cariñosamente. Me reí. Y siguió: incluso cuando la has abandonado todo el dia.
Tú a mí me dejas de lado todos los días hasta que me necesitas, y yo siempre te recibo con los brazos abiertos.
¿Es esto el ''amor''? Para eso yo no quiero sentirlo.

Está, pero no para ti.

-Conectate, conectate, conectate...
Él se ha conectado. Abres su ventana de conversación, sonríes al ver su foto de perfil en pequeñito al lado de la barra de tareas. La abres, y la minimizas. No la quitas del todo, la dejas ahí, a la espera de ver ese circulo verde con un 1 en medio, señal de que esa persona te ha hablado. Esperas. Cambias tu estado, tu tablón lo actualizas cada 2 minutos, te etiquetas en 5 fotos, te unes a 10 páginas y empiezas a ponerle comentarios a todos sin razón, simplemente para que, cuando él le de a actualizar, te vea, vea que estás conectada. Tus visitas suben como la espuma, está claro que estás la primera. Continúas con estos cambios, abandonando a los demás que sí que tienen tiempo para hablarte. Cierras su ventana, indignada. Pero bajas la lista del chat hasta su nombre, observando si sigue ahí. Hasta que no puedes más y la vuelves a abrir, a la espera de si eso consigue algo. Nada. Los demás siguen hablando, impacientes. No respondes, no tienes ganas. Sólo lo esperas a él.
Son la 1 de la mañana, estás cansada, mañana madrugas, pero no te vas, porque él sigue conectado, y aún tienes la triste esperanza de que te hable. Entonces se te ocurre la estúpida idea de que quizás se lo ha dejado encendido y en realidad no está. Esa idea te acompaña el cuarto de hora siguiente, con 4 estados, 15 tablones, 30 páginas y 25 comentarios nuevos. Esa idea es lo único que te mantiene despierta.
Le das a actualizar la página, él aparece el primero. Ha cambiado el estado. Le ha comentado una zorra. Él ha respondido. Está. Está, hablando con otra. Está, pero no para ti. Entonces cambias radicalmente de pensamiento.
-Desconectate, desconectate, desconectate... si no vas a hablar conmigo, tampoco con ella.
Y deseas con todas tus fuerzas que se vaya, para que paren de hablar. Y cierras su ventana con lágrimas en los ojos, pero sigue la lista bajada en su nombre. El número de conectados baja. Miras. Se ha ido. Se ha ido él. Y de repente, te arrepientes.
-Vuelve, vuelve, vuelve...
Y cuando le estás dando a apagar, aún con su nombre en el chat, vuelve. Cierras la pantalla de apagar equipo. Vuelves a actualizar. Quizás la puta esa ya se ha ido y pueda hablar contigo. Pasa el rato y sigue ahí, sin hablar. Y al rato se vuelve a ir, y esta vez no vuelve. Apagas y te vas a dormir. Va a ser una noche muy larga.

He tocado fondo pero estoy cómoda en él

Me caigo, me levanto. Siempre igual, siempre la misma piedra. Soy de apariencia fuerte y carácter débil. Sonrío aun sin sentirlo, y aunque no lo creas, me duele escuchar tus problemas, me duele cómo me dices que tienes problemas con los demás, me duele que me digas que tienes un asco de vida, cuando no sabes cómo me siento yo. No sabéis lo que es escuchar a la gente hablar de que les gustan las cosas a la cara y que a mí me critiquen por ello, por ser sincera. Nadie sabe lo que duele levantar a alguien, y que al levantarlo te agarre del brazo y te tire a ti. Nadie sabe lo que sufren mis oídos, poniendo Hardcore a toda ostia, para no escuchar a mi cabeza diciéndome lo estúpida que soy por darle una oportunidad a él. Nadie sabe que yo también tengo sentimientos, que si me enamoras y luego te vas con otra me duele joder, me duele.

Más claro agua.

-Estás muerta de sueño, ¿por qué no te vas a dormir?
+Por amor.

¿Pero dónde están los besos que me debes?

Soy orgullosa, y mucho, si tú no me hablas yo tampoco. Soy cabrona, joderé lo que pueda y más a quien me caiga mal, ¡Sobrevive o muere! Soy celosa, soy de esas tías que hacen mejores investigaciones que el FBI cuando me interesa. Soy bipolar, ahora soy feliz, ahora de bajón, ahora me enfado pero aún pretendo que me llames. Soy cabezota, siempre tengo la razón, y punto. Pongo cara de asco cuando algo me parece mal y si me pareces gilipollas lo diré en alto, doy dos oportunidades pero nunca tres, pongo nervioso hasta al café, pretendía suicidarme con paracaídas... Pero, ¿sabes qué? Pese a todo, pese a todos mis defectos, tengo una virtud que supera con creces a todo lo demás: te quiero, más de lo que nadie podrá hacer jamás.

Aficiones y demás estupideces.

Hoy, entre aburrimiento y nada que hacer, me he sumergido en algo que todas las redes sociales preguntan. Tus Aficiones. Y todos, dependiendo de como sean, responden lo mismo. Los más chungos dicen: fumar un peta con mis amigos ko! Los más pijos dicen: skate, bmx, etc... Y los vagos simplemente ponen: no me rayes... o ni responden. Las más chonis dicen: fieeeeesta! Las más románticas dicen: tú(L) Y las más sociales ponen a todas sus amigas, una por una. Yo, sinceramente, no tengo nada de eso, esas no son mis aficiones ni de lejos... Lo mío es reirme tan alto y tan fuerte que la gente lo flipa, poner nervioso a todo el mundo por no dar conversación, querer a quien no tengo que querer, hacerme 1000 fotos y subir 5, ser taaan sincera que hiero sentimientos, ser una asquerosa celosa pero incluso con gente que ni me gusta (yo tampoco lo entiendo), dejarme engañar, ser un ángel caído del cielo de lo buena que soy (esto creo que es mentira pero vamos), y, sobretodo, mi afición más grande, es ser feliz. ¡Te quiero!

Esta vez vas a participar tú en un intento de estar más cerca de mi.

A todas aquellas personas que lean esto, me gustaría haceros unas preguntas, sólo es una pequeña prueba para saber si estás enamorado/a. ¿Te pasarías toda la noche esperándole? ¿Sonries cuando le ves? ¿Dejarías que una bala te traspasara el corazón por protegerle? Responded sinceramente. Bueno no, no necesito ni que respondáis siquiera. Simplemente te voy a asegurar que estás enamorado/a, sí, de la persona que ha venido a tu mente al leer las preguntas... Sin importar la respuesta.
Y sí, sé que estás sonriendo en este momento.

Yo no soy princesa

Después de mucho recapacitar, he entendido por fin por qué no tengo el príncipe azul con el que todos sueñan, y es que yo... yo no soy princesa. Ni nunca lo seré, porque no va conmigo. Porque yo no llevo vestidos larguísimos, qué va, yo soy de shorts e incluso minifaldas. Porque yo no llevo perlas, yo llevo unos aros que relucen mucho más. Yo no soy de esas princesitas que se pintan como puertas, yo lo básico y ya está, que lo natural triunfa. Tampoco soy una chica de lo más fina, es más, digo tacos hasta entre dientes... joder. Realmente, de fina no tengo nada, todavía nadie me ha dicho algo que pueda considerar guarro, porque cada cual que diga lo que quiera que yo contesto. Si me molesta algo te saco el dedo índice, si me vacilas te contesto, si sigues jodiendo te mando un beso. Yo no quiero un anillo que para mi significa compromiso, quiero un colgante que me diga te quiero, y listo. Ah sí, lo olvidaba, quiero un sms, una carta, como gustes, pero no me mandes flores que se marchitan, los mensajes al menos se guardan, sabes? Yo prefiero sonreirle a los problemas que lloriquear por ese príncipe que no llega ni llegará, porque esos no son para mi, para mi es un tío normalito, con sus defectos y virtudes, con sus vicios y manías, con sus venazos bipolares y sus rayadas, porque a mi lo perfecto no me va, sabes...

Feliz no-cumpleaños

Estoy sentada delante de un mar de recuerdos, y es que me cuesta respirar al pensar la primera vez que te vi. Dicen que la vida se mide por momentos que te quedas sin respiración, mentira, si así fuera yo sería demasiado vieja, porque sin respiración me quedo cada vez que te veo aparecer... Te quiero. Es una simple palabra en boca de muchos, en la mía, total sinceridad. Te quiero. Te quiero, te quiero, te quiero! Como la primera vez que te vi, con todo mi corazón, como quieras llamarlo, y es que no hay quien quiera leerme la mente, porque en ella simplemente, estás tú. En tu cumpleaños, yo soplaría las velas por ti pero no puedo, porque para que se cumpla un deseo no debes decirlo, y yo quiero decirte cada día que lo único que quiero es tenerte conmigo cada día, así que te dejo la tarea a ti, pero prométeme una cosa: si estoy yo en ese deseo, dame un beso, de esos tuyos, porque es lo mejor que puedes hacer con tus labios junto a darme una de tus sonrisas.

Sin título previo

Hoy no vengo a hablaros otra vez de lo enamorada que estoy de él, de parrafones sobre lloros o risas, no no. Hoy vengo a referirme a vosotros, gente insensible que luego encima pregunta por qué esto va tan mal. No me refiero a putones y zorras que te joden y luego te abandonan, me estoy refiriendo a esa gente se quejan de ti y luego son iguales no, qué digo, peores, mucho peores. Que sois capaces de reiros de cualquier desgracia, niñatos insensibles sin pizca del sentimiento de culpa, hacéis comentarios idiotas, luego se enfadan con vosotros y no sabéis por qué. Y dónde estan esos tíos que acompañan a su novia a ver tres metros sobre el cielo y esas tías que van a los partidos de su novio joder, debo de ser un imán para gilipollas porque estoy rodeada de ellos, de gente que se mete con los defectos de los demás sin mirar los suyos propios. Que me reventais que luego no sabéis por qué estoy harta de ser buena, llevo años aguantándoos y seguís como el primer día, hay más lágrimas de tristeza que de risa y la culpa es vuestra, lo sabéis pero preferís culpar al de al lado, cobardes hasta para asuntos de palabra. No sois capaces de decir te quiero a la cara, pero sí de decir ¿nos lo montamos? ¡Dónde estoy joder!

Reflexiones entre sábanas y almohadas

Hoy no vengo a hablaros de amor, vengo a hablaros de amar. Hoy no vengo a contaros historias, hoy vengo a contaros cuentos. Hoy no vengo a decir sobre dolor, hoy vengo a demostraros la felicidad. Y es que soy tonta, sí, yo, niña arrastrada por sus sueños de princesa enamorada, que no se enamoró de un principe sino de una rana pero, ¿qué mas da ? Yo no quiero hundirme, no quiero llorar, yo quiero pintarle color sonrisa la cara al dolor, yo quiero entrar en el Record World Guiness como la persona que antes se levantó de una caida de este tipo, porque no es más fuerte el que menos veces se cae sino el que antes se levanta. Quizás siga queriendo estar a tu lado, quizàs todavía te daría una oportunidad, pero eso quedará encerrado con llave, y solo saldrá cuando deba salir, cuando tú lo digas, pero se volverá a cerrar tan rápido como tú me ignores. Hoy voy a darle las gracias a todos los que han echo posible mi sonrisa, a todos los que me han levantado aunque fuera sin querer, hoy quiero seguir mi rutina, ir al instituto, aburrirme, contarle a mi compañera de mesa lo pesado que es el profesor, llegar al recreo, contar novedades, quiero salir del instituto como quien sale de la cárcel, llegar a casa, hablar con la gente, hablar de chorradas, hacer reír, darme una ducha de esas que te renuevan por completo, y cuando me vaya a dormir, iré con una sonrisa en la cara, porque pase lo que pase dentro de mi interior, si no sonrío nunca voy a salir de aquí.

Dejad de hablar y vivid la puta vida!

La verdad me gustaría entenderos, pero no puedo. Me gustaría saber por qué lloráis cuando podéis reír, por qué me miráis raro cuando me veis sonreír sabiendo que estoy jodida por dentro, por qué jugáis con los sentimientos de los demás y luego llamáis puta o cabrón o a los demás, por qué habláis de suicidarse si estáis todos los días con la botella de ron y las pastillas de éxtasis y no recordáis nada. Por qué habláis de asco de vida cuando tu mejor amiga te miente, si seguramente tú le habrás mentido antes. Por qué habláis de gilipollas y de que estáis hartos si somos los demás los que estamos hartos de vosotros, gilipollas. No os gusta el amor pero queréis ser amados, odiáis a los falsos y sois los primeros en dar la puñalada a la espalda, decís que sois fuertes pero yo siempre os veo bebiendo para olvidar. Dejad de hablar, joder, dejad de hablar sin sentido y vivid la puta vida.

Yo ya estoy cansada de sufrir por amor-

Me he caído, sí, yo, esa que parecía que nunca lo hacia, estoy hundida en un mar sin fondo, me tiré del precipicio y cai, volé volé por lo que al caer el golpe fue más fuerte. Me muero por dentro y lloro sin lágrimas, porque has vuelto a hacerlo, has vuelto a hacerme daño y no te arrepientes, te has propuesto joderme la vida y lo estás consiguiendo. Pero también sé que no vivo por lamentos, así que me levantaré, de alguna manera, no sé como, no sé qué hare cuando te vuelva a ver, me gustaría chillarte, llorarte, darte en ese corazón tuyo que un día dijiste que era mio. Pues bien, reclamo lo que es mio, reclamo por lo que ahora lloro. Aunque en realidad no puedo reclamar nada, porque el corazón que busco tú no lo tienes, no puede tenerlo alguien que solo sabe enamorar para atacar. No sé vosotros, pero yo ya estoy cansada de sufrir por amor, de llorar por gilipollas, de echarme la culpa de algo que obviamente no tengo la culpa, la culpa es de él por creer que me quiere y dejarme como un juguete que ya nadie quiere. Y sí, he querido, he deseado que tus palabras fueran ciertas, aunque fuera una de ellas, pero todas se han caido con mi cuerpo por mi precipicio, porque eran mentira, todo mentira. Me lo dicen todos, que desde hace un tiempo estoy más depresiva, más tímida, que me estás haciendo daño, que no me quieres, y es que me duele escuchar todo eso, pero es que las verdades duelen... Y yo no quise creerlas, y aquí estoy.

El tiempo pondrá a cada cual en su lugar.

Entre gilipollas que se enfadan por cualquier cosa, putones que están desesperados y falsos que dicen decir las cosas a la cara yo empiezo a pensar que tenéis más cara que espalda. Que sí que me da igual lo que digáis, pero que metéis mas puñaladas que respiráis, y sino montáis pollos por cualquier chorrada, y sino rompéis corazones así por las buenas. ¿Que yo soy mala? No, soy realista, mi cuerpo está harto de balas de perdigón apuntando a matar, mi cabeza está harta de rayadas que os metéis solos y mi corazón harto de sufrir por idiotas. Pero, ¿sabéis qué? El tiempo pondrá a cada cual en su lugar.

O s o d i o .

No tengo ganas de pensar, no tengo ganas de escribir, solo quiero desconectar, olvidar, uno me utiliza y otro intenta hacerme callar. Sois lo peor...

Soy tan fácil

No sé si ya es costumbre, pero siempre que me conecto miro a ver si estás. Escribo estas líneas desde lo más hondo de mi corazón y mis lágrimas, rodantes por mis mejillas en estos instantes. ¡Por qué es todo tan difícil? ¿Por qué no puedes ser como los demás? Soy tan fácil, ¿Por qué no lo aprovechas? ¿Por qué? Lo daría todo por ti, ¿sabes? Eres el único capaz de hacerme sentir tan ridícula... cuando te hablo y no contestas, cuando te pregunto algo y me esquivas, cuando busco tu mirada y tú la apartas... Soy lo que necesitas, ¿entiendes? Intento hacer de ti alguien mejor, porque no es la que más te quiere la que te coje tal y como eres, sino la que intenta cambiar tus más sucios vicios para que seas mejor, y ésa soy yo, aunque me ignores, me evites y me hagas sentir como la más pequeña de las hormigas. Te quiero, ¿no lo ves? Pero no soy capaz de demostrártelo, aunque de verdad que estoy deseándolo, pero me sentará tan mal esa negativa niño, que prefiero joder mi corazón a la larga que todo de golpe. Y es increíble lo tonta que soy contigo, como llego a pensar que tengo alguna posibilidad cuando me hablas, como llego a pensar que verdaderamente te importo algo. Luego llega la caída, veo un comentario, una foto, un estado... de una puta, porque eso es para mi, que te dice te quiero, le dices yo también a ti, y me caigo al más profundo abismo, porque ella jamás le dará tanto significado como le daría yo. Que las lágrimas siguen cayendo amor, cuando pienso que si no me contestas es porque tienes una puta más importante a la qe hablar... pero te quiero tanto. Y te juro que si me pidieras que te baje una estrella del cielo, yo te traería un espejo, porque no hay nada tan bonito como tu reflejo...

He sido princesa de Disney sin príncipe.

Me siento... como la protagonista de un cuento infantil que nadie quiere. He sido la lechera que llevaba una jarra de leche en su cabeza, que por el camino pensaba en todo lo que haría con él y cómo se volvería rica, para que luego se le caiga la jarra y todos sus sueños se rompieran de un plumazo, solo que cambia la leche por tu amor. He sido Cenicienta, te he hecho sentir lo que nunca en aquel baile pero, cuando se me cayó el zapatito tú no viniste a buscarme, te fuiste con otra. He sido Blancanieves, inocente al comerme la manzana, sólo que tú llegaste tarde para despertarme y ahora ya no sé distinguir el sueño de la realidad. He sido Pedro de Pedro y el Lobo, tantas veces he creído amar, que ahora que verdaderamente lo siento nadie me cree. He sido la Sirenita, acepté un trato amañado para estar más cerca de ti y luego acabar perdiendo yo. He sido idiota, inocente, ilusa, he creído que cada vez que me mirabas era porque sentías algo, he creído que de verdad podía pasar algo entre nosotros, me he dejado caer en tus brazos para que te apartaras y así caer en el abismo. Te he pensado tantas veces, que ya perdí la cuenta.

Te quiero a ti, a tu forma descarada de ser, a tus malos vicios y eso tan tuyo que me gusta

¿Sabes qué oí ayer? Que si escribes un deseo en un papel, lo rompes en cachitos y lo tiras al río, se cumple. Sin embargo, el río no es lo suficientemente grande para pedir todo lo que me gustaría... ya que, por pedir, pediría darnos tantos besos como estrellas salgan hoy. Pediría una noche a tu lado en Groenlandia, de esas que duran 6 meses. Pediría que tu sonrisa me despertara cada mañana, seguido de un Vamos hoy a comernos el mundo hasta quedarnos llenos. Pediría que me cogieras por detrás y me abrazaras, que me tocaras el pelo seguido de una frase que dijera lo bonita que me encuentras hoy. Pediría que vinieras a buscarme en un corcel blanco, con una anillo en la mano y con una rosa roja y que... STOP. PARA. Todo esto es mentira. Yo no pediría todo esto. Yo no pediría darnos tantos besos como estrellas salgan hoy, yo pediría superar a las estrellas. Yo no pediría una noche a tu lado, aunque fuera en Groenlandia, ¡yo pido una vida entera a tu lado! Yo no pediría que tu sonrisa me despertara cada mañana, ni seguido de ninguna frase, yo prefiero que me des las buenas noches con un beso, porque por la mañana estoy demasiado dormida como para darle toda la importancia que tiene tu sonrisa. Y bueno la frasecita sobra, creo yo. Yo no pediría que me cogieras por detrás y me abrazaras, ni me tocaras el pelo ni me dijeras nada, porque si me tienes que coger y abrazar significa que me has soltado antes, y yo no quiero que me sueltes nunca, no quiero que me toques el pelo ni me digas nada, porque estarías demasiado ocupado dándome un beso de película como para hacer nada más. Y yo no pediría que vinieras en corcel blanco con una rosa roja, ¡Qué cojones dices! A mi me vienes a buscar en skate, o en bici me da igual, yo no quiero un anillo en tu mano, quiero tu típico cigarro, que es malo pero yo me enamoré de quien eres con tus vicios incluidos, y tampoco quiero una rosa roja, quiero que me susurres que esto es para siempre, que las rosas se marchitan como el amor de los galanes. Te quiero a ti, a tu forma descarada y maleducada de ser, a tus malos vicios y a eso tan tuyo que me hace llegar a lo más alto del cielo, porque solo tú sabes qué palabras decirme.

Niña de papá ama a niño de la calle'

¿Estamos tontos?

A lo largo de mi vida pequeñas notas se han ido pegando en mi alma, dándome normas sobre cómo vivir. Hoy quiero compartirlos...

Norma número 3- Vive rápido y no pienses lo que haces, sólo te traerá paranoias sin sentido.

Norma número 7- Ama a todos y cada uno de los tíos cabrones que encuentres, total, ¡Lo harás aunque no quieras! ¿Por qué no hacerlo queriendo?

Norma número 13- Si se te antoja algo, cógelo. 

Norma número 17- Sé humilde pero sé egoísta. Mejor serlo que quedarte sin nada.

Norma número 19- Comete errores, pero prométeme que te levantarás lo más rápido posible.

Norma número 21- Ten todo lo que veas, el más rápido gana.

Norma número 22- Explota al máximo tu energía, el aburrido es el que pierde en este mundo de gigantes.

Norma número 23- Quiere lo que no tengas o hayas perdido. Es ley de vida.

Norma número 24- Únete al que veas reír sin parar, la risa alarga la vida, hazte inmortal.

Norma número 25- Imagina tu mundo de colores y llora al despertar. La vida no es vida sin lágrimas sucias.

Norma número 26- Enfádate con medio mundo y después sonrieles. Odio ser bipolar, es fantástico.

Norma número 27- Ríete cuando alguien se caiga pero no de los complejos, ellos harían lo mismo.

Norma número 28- Obliga a tu cabeza a hacer caso al corazón. Éste es el que te hace vivir.

Norma número 32- Lo que no mata, te hace más fuerte.

Norma número 36- Lo de arriba es mentira. Lo que no mata engorda o es caro.

Norma número 40- No te arrepientas de nada, quizás hayas conseguido con eso algo mejor.

Norma número 44- Parecías tonto, pero eres gilipollas. Recuérdamelo siempre que hables conmigo.

Norma número 47- Disfruta de los pequeños detalles y de las cosas bonitas, quién sabe cuando volverás a oírlas.

Norma número 49- No te fíes de nadie ni sigas a nadie. Sé libre. ¿Para qué seguir al rebaño pudiendo ser cabra solitaria?

Norma número 50- Ámame como yo te amo a ti.

-Lee la primera letra de cada norma de la 21 a la 28, éstas incluidas, y juntalas formando una palabra. Me gustaría que me dijeras eso.-

Estás pensando en montarte en esa montaña rusa... conmigo.

-Mira esa montaña rusa... tiene pinta de ser alucinante.
+Tengo mariposas en el estómago.
-¡Por favor! Has hecho cosas mucho peores. Además, me dijiste que querías hacer paracaidismo.
+Es cierto.
-¿Entonces cómo te va a dar miedo?
+A mí no me da miedo... Creo que mas interpretado mal. Yo no tengo mariposas en el estómago por ver la montaña rusa, las tengo por estar a tu lado... Siempre que apareces con esa sonrisa de suficiencia, siempre que me miras y apartas la vista confuso, siempre que intentas hacerte notar delante mío, siempre que te percatas de mi presencia.
-Ah, entiendo... entonces yo tengo un ecosistema entero en mi estómago.
+¡No seas tonto! Tu también querías hacer paracaidismo.
-Tu también me malinterpretas... Tengo un ecosistema entero no por la montaña rusa, sino por la morena que tenemos delante.
+Gilipollas.
-¡Es broma, no te enfades! En realidad este ecosistema dentro de mí se debe solo a ti. Cada vez que apareces y piensas que mis sonrisas van por ti (si que van por ti pero eso tú no lo sabías, doña creída), cada vez que te miro, me miras y me obligas a apartar la vista derrotado, cada vez que te das cuenta que intento hacerme notar delante tuyo, cada vez que noto que sonríes al hablarte.
+Tú sí que eres creído, y un idiota...
-Probablemente, pero si soy idiota es por tantas cosas que tengo en la cabeza, ¿sabes? Por ejemplo, ahora mismo aparte de hablar estoy pensando en montarme en esa montaña rusa.
+Te has olvidado de una cosa.
-¿De qué?
+Estás pensando en montarte en esa montaña rusa... conmigo.

Me muero cuando llega el día y me ignoras.

No sabes lo importante que es para mí cuando me miras y te ríes sin motivo, cuando me preguntas si estoy enfadada, cuando te acercas a mí cuando estoy mal y me haces sonreír. Pero no sabes cómo me gustaría lanzarte algunas veces una lámpara a la cabeza, cómo me gustaría gritarte cuatro cosas por lo inmaduro que eres, cómo me gustaría tirarte al suelo al cigarro que estás a punto de fumar. Y es que no sabes que me muero porque llegue el día de verte, y me muero cuando llega ese día y me ignoras. He intentado hacerme notar de todas las formas posibles, he intentado que te des cuenta que quiero estar a tu lado, he intentado todo lo que se te ocurra... pero nunca da nada resultado, siempre tienes tiempo para todas, menos para mí. Y me duele tanto aquí, más arriba del estómago, entre los pulmones... porque ahí debería haber algo funcionando, pero se fue cuando entraste en mi vida, y desde entonces siento un vacío que sólo se llena cuando estás tú. Rezo cada noche porque mañana me mires, sonrío al hablar contigo, vuelo cuando pienso en ti, y es que no sabes que mi felicidad depende un poquito de ti...
-SC.

Me duelen tanto tus mentiras que ya creo que me gustan.

Salgo a la calle vestida de princesa, con el pelo bien peinado y sonrisa de película. Los tacones me hacen grande en este mundo de gigantes, los pendientes más grandes que he encontrado tintinean suavemente contra mi buen humor. Paso una tarde perfecta al lado de la gente que quiero, sonrío, hago locuras y vivo al límite. Pero yo no me siento así niña... Llego a casa mientras tiro al infinito mi sonrisa de cristal, me tumbo en la cama, me pongo a llorar. Yo no soy feliz y hace tiempo que no lo soy, pero la gente piensa que sí, la gente me ve como una persona fuerte que no se cae nunca, y esa es la reputación que me gusta tener, aunque realmente me duelan tus comentarios punzantes, cuando fardas de cuántas tías te vas a tirar hoy, cuando te digo que soy feliz viéndote feliz y realmente lo que quiero es que seas feliz junto a mí... No puedo evitar chillar de rabia, veo borroso a causa de las lágrimas que nublan lo que antes era mi supuesto buen humor. Entre gritos y lágrimas consigo ver un folio en blanco que a la vez tiene escritas todas las promesas que me hice. No pensarás más en él. No desearás que llegue el día de verlo de nuevo. No creerás que cuando dice que está enamorado habla de ti. No mirarás su cálida sonrisa a escondidas. No sonreirás al verlo aparecer ni al escuchar su voz. Y pese a todas las promesas que me sigo haciendo, Sigo pensando en él, sigo deseando que llegue el día de verlo de nuevo, sigo creyendo que cuando dice que está enamorado va por mi, sigo mirando su cálida sonrisa a escondidas, sigo sonriendo al verlo aparecer  o al escuchar su voz.

Me faltan fuerzas para odiarte.

Es viernes por la noche, las luces encendidas, el cielo estrellado, enamorados en un banco y desesperados en una esquina. Puede verse el humo de un cigarro tan consumido como mi vida en un balcón lleno de malos pensamientos, las cenizas caen sobre sueños rotos, las lágrimas amargas caen sobre un sólo contacto del móvil, aquel al que llevo esperando todo el día. Tacones preciosos y un par de pendientes carísimos tirados por el suelo de la habitación, restos de maquillaje de Chanel por el lavabo y una minifalda de escándalo mal colocada en la cama. No, no es que haya ido a una fiesta. Tampoco en una discoteca. Todo esto era para ti, para tu sonrisa, para tu mirada de niño que hoy no he vuelto a ver... He salido a la calle vestida como una princesa por si te podía encontrar por casualidad, ya que mi móvil sólo ha sonado una vez hoy. Como entenderás he ido corriendo a cogerlo, casi me tropiezo por el pasillo de la emoción. He leído de quien era... de mi compañía de móvil, me recargan el saldo. Genial, perfecto. Así que lo he decidido, he salido a calle, he pasado como alma en pena por tu casa, tu campo de fútbol, por donde quedas con tus amigos... no estabas. Pero se me ocurrió la fatal idea de buscar en tu parque favorito. Ahí estabas tú, tan perfecto como siempre, con otra chica... Mis lágrimas saltan sólo de recordarte con ella. Nunca te querrá como yo. Lo sabes tú y lo sé yo, pero hoy has decidido dejarme plantada por ella. Las luces se apagan, el cielo se enciende, el reloj marca la madrugada. Pero en mi cabeza ya no pasa el tiempo, porque se ha detenido en esa imagen, siempre esa imagen.

Me dijiste que yo era la única, ¿Sabes? Debería odiarte, debería querer clavarte un boli en la yugular, pero ¿Sabes? Te quiero demasiado como para odiarte. Hay más recuerdos malos que buenos, me has hecho mas daño que bien, y pese a todo... te quiero como eres, te quiero en mi vida, dejaría que me hicieses daño una y otra vez si con ello te tuviera un segundo conmigo...

Revuelos de pensamientos sin sentido, sin emoción.

A toda ostia, a 300km/h, mi cabeza gira, la música truena y mi vida se consume más rápida que una vela junto al sol. Salto, vivo, río y me tiro al vacío, vuelvo al camino, me subo a las estrellas, me tiro de cabeza. Salgo a la calle, me estampo contra el duro suelo y me parto los dientes de dos en dos, mientras un turista me graba al otro lado de la acera, le saludo con la mano y me voy en tren dirección perdida, buscando los cachitos de sueños esparcidos por el mundo, como las cenizas de mi última vida. Un billete a la calle de las piruletas por favor, donde todo es posible y no tengo que fingir esta puta sonrisa que no quiero tener pero la tengo por fingir, por aparentar lo que no soy. Escribo esta entrada con todo mi odio, dolor y locura de mis arterias, ahora secas y vacías debido a que toda la sangre está reunida en mi corazón tapando esa herida que no para de sangrar. No soy capaz de recordar que la vida y la realidad son sinónimos de asco, llaman a mi teléfono pero, no lo cojo, ¿por qué? Porque no espero a nadie hoy, echo a correr por la ventana aunque nadie me sigue, hablo con las paredes que dicen que lo oyen todo. Y sale la luna mientras los bebidos la aúllan, y sale el sol mientras los mismos se sientan en su pupitre a la espera del sábado noche. Fiebre, fiesta y ruido, fenómeno imperdible, todos viendo doble mientras yo veo una única sombra, a la velocidad de las estrellas. Es alto, pelo y ojos castaños, va en skate y lleva el escudo de su equipo de fútbol grabado en su piel, que no es el Real Madrid o el FC Barcelona, sino el suyo propio, el que juega con carne y fuego para luego merecer una áspera derrota. Lleva una sonrisa de papel pegada a su boca, el pelo corto en ocasiones terminado en cresta, para aquellos ignorantes un tipo normal, para mí el protagonista de mis sueños. Te acercas mientras se te cae la sonrisa de papel, me miras, y me hundes en un sentimiento nuevo, lleno de celos y amor, receta de dolor y alegría.

Vodka de mil colores distintos.

Hoy no me apetece sonreir, no me apetece ser sincera, no me apetece jugar, sólo quiero tumbarme en mi cama, alejarme de todo y todos y poner la música hasta quedarme sorda. Lo inevitable tiene que pasar, hoy ha pasado... Pero a mí nadie me hunde, ¿entiendes? Voy a seguir aquí niño, beberé unos tragos de más del vodka rojo, blanco, negro, azul, verde, me da igual el color del que lo llames, miraré a los ojos al sol, lloraré un rato y volveré a la calle, donde me espera la gente que nunca me fallará, o eso digo ahora pero, me da igual ahora mismo. No sé si sonreiré o no, pero con el tiempo lo haré, ya lo verás, y conoceré a mi príncipe azul, no a un gilipollas esférico (porque es gilipollas mires por donde mires) de esos de Ahora me gustas, ahora no, ahora te hablo, ahora eres una pesada, ahora no pienso nada. Suena un cacho de la canción que tantos momentos vivió, que tantas sonrisas me trajo, que tantas mejillas sonrojadas me hizo tener. Sigo tendida en mi cama escuchando rock a todo volumen, los pies apoyados en la pared, la mirada perdida y ese corazón envuelto el llamas. He escrito tu nombre de mil formas distintas, me lo he tatuado en el corazón, he ahorcado las mentiras y le he dado un vuelvo a la razón... todo por ti, aunque tú ahora estás detrás de esa cría que no te dará ni la mitad que te hubiera dado yo. Mis lágrimas no se distinguen en mi vaso, repleto hasta el borde de alcohol, dispuesta a curar mis heridas con morfina y a pincharme adrenalina hasta morir. Me cuesta tanto pensar en alguien que no seas tú...

We are who we are.

Qué quieres que te diga... me encanta la música House, o Electro, como quieras llamarla, porque me martillea la cabeza hasta no dejar hueco a mis pensamientos, por lo que siempre me veras con la Máxima FM puesta a todo volumen. Me gustan las películas de miedo, que te enganchan desde el primer minuto hasta el final, y no te deja pensar, por lo que me encontrarás enganchada a cualquiera de ese tipo. Me pierde el andar como si tuviera prisa, sin fijarme lo que tengo alrededor ni mirar atrás, y no aguanto ir despacio, por lo que siempre me verás salir la última de casa y llegar la primera. Hablo rápido, en ocasiones demasiado, a veces ni vocalizo, porque no me gusta perder ni un segundo de mi vida. Si quieres tenerme, hazlo rápido, dime unas cuantas palabras bonitas, y lánzate, no pierdes nada, porque cambio de opinión cada dos minutos. No me va demasiado la televisión, soy más de engancharme a internet, porque la televisión me deja demasiados ratos libres en mi cabeza. Soy impulsiva y para nada racional, vivo todo lo que puedo y más, odio pararme a pensar las cosas dos veces, ahora entenderás por qué la música house o las pelis de miedo, quienes no te dejan espacio para nada más. Conmigo te divertirás lo que no sabías, vivirás de verdad, puedo darte lo que los demás no saben, puedo darte el vivir sin pensar, puedo darte el vivir por impulsos. Que si se me antoja algo lo cojo, puedo enseñarte a hacer lo mismo, también te enseñaré a no pensar, a ser feliz, porque es más feliz el ignorante que el sabio, te lo aseguro.
Ponme una canción de David Guetta, caeme bien, dame un tema del que hablar, salúdame con un 'qué pasa, princesa?' y disfruta de lo que soy capaz.

No te fíes nunca, ni de ellos ni de ellas-

-Hola, soy un tío. Ahora me gustas, ahora no, ahora tonteo contigo, ahora te ignoro, ahora eres una pesada, ahora no pienso nada.
Pero, míraos. Salidos como el canto de una mesa, sólo buscais haceros los machos delante de la gente metiéndoos con los más débiles, ahora sí, siempre con 2 colegas a tu espalda. Y si no conseguís haceros respetar con el royo macarra, haceros los románticos amables que se preocupan por todas las tías que creen que se las podran tirar así. Conviértete en un putón, líate con todas y de 24 horas, estate 25 de calentón. Rompéis los corazones de las tías con palabras vacías, pero os sentís superiores así, corónate de cabrón.

-Hola, soy una tía. Ahora eres mi vida, ahora eres mi saco de lágrimas, ahora te quiero, ahora estoy confusa, ahora quiero a tu mejor amigo.
Pero, miraos. Maquilladas como puertas hasta para comprar al supermercado, habláis de salidos y vosotras vais con una minifalda que parece que no llevéis nada. Llamáis puta a toda la que os haga competencia, pero luego os hacéis fotos con todas las posturas posibles, y por supuesto, esa 'puta' será tu mejor amiga mañana. Utilizáis a quienes os quieren ayudar de confidentes, queréis contarles todas vuestras penas y que se callen y escuchen todo, ahora que no intenten contarte los demás las cosas.

-Hola, soy un velicirráptor. Ahora me molas, ahora no, ahora me cansas, ahora te como.
Como conclusión, todos damos bastante asco, y decirte que no te fíes nunca, ni de ellos ni de ellas.

Te echo de menos.

Desconecto, y pienso. Pienso... con los pies sobre la fría pared, la cabeza apoyada en la almohada mal puesta y los auriculares a todo volumen con esa canción que me recuerda tanto a él. Si me concedieran un deseo, ahora mismo pediría una sonrisa suya, una carcajada provocada por mi culpa, una vida a su lado... una noche en Groenlandia, de esas que duran 6 meses. Se puede leer la palabra ''amor'' escrita con cachitos de mis sueños rotos en la pared, sí, esa pared fría en la que tengo apoyados mis pies. La verdad, sé que hablas con palabras vacías, sé que tú no buscas nada serio, pero quiero creerte, necesito creerte. Necesito que me digas te quiero aunque no lo sientas, necesito ver tu nombre escrito en mi ordenador, necesito sonreír por tu causa, que me mientas, que me engañes. No puedo escuchar más de 3 canciones de mi MP5 porque me recuerdan a tí. Y es que eres mejor... que el chocolate cuando estás enamorada, que una noche sin dormir con tu mejor amiga, que un concierto en directo de tu cantante favorito, mejor que una botella de vodka en mitad de una fiesta light, que un 69, que una sonrisa de oreja a oreja. Mejor que todo eso, eres tú.
... dice: Ella te ama, gilipollas. Y tú la has matado de ilusiones. Ahora ten una visita de tu ángel y tu demonio...
+Siente el frío del pánico!
-No hagas caso, ella se lo merecía!
+Dio la vida por tí sin pedir nada a cambio!
-De quién te vas a fiar?
+En quien confías?
-Dicta!
+Cuida!
-+Elige una conciencia de las dos: bondad o malicia!

Dime si ella hace lo que yo hago por tí

Dime si ella hace lo que hago yo por tí. Dime si ella se sabe de memoria todas tus fotos, se ha leído todos tus comentarios y estados, si ella ha puesto verde a todas tus ex's. Dime si ella sonríe cuando le hablas, si piensa en tí cada mañana o si busca tu mirada por los pasillos. Dime si ella es capaz de quererte como yo... Porque estoy pilladísima por cada una de tus palabras y de tus virtudes, pero también por tus defectos, llámame tonta pero adoro cómo juegas conmigo, aunque luego caiga en depresión... Amo cuando te me quedas mirando con esa sonrisa tuya de autosuficiencia. Me gustan cada uno de tus gestos, tu ropa, tu sonrisa... Tu sonrisa es preciosa. Daría la vida por un día a tu lado, por disfrutar de tí. Aún recuerdo cómo era antes, una chica sin preocupaciones, que al despertar pensaba en blanco, que sonreía por todo y que era independiente. Ahora sé que sólo me preocupo por tí, que al despertar pienso en tu vida, que sonrío al verte y que dependo de tu estado de ánimo. No es que sea celosa, es que te quiero sólo para mí... te daría mi vida, te daría mi todo, pero es que mi vida y mi todo eres tú, sólo tú. Estoy segura de que la caída será grande y que caeré en un abismo pero, si por lo inevitable no se puede hacer nada, permíteme al menos disfrutar de este tiempo contigo... te amo.
HHHHH*

Sé que te resulto indiferente

Sonrisa de niña, ojos brillantes, sensación de peligro. Una botella en la mano, el pelo suelto, dos pendientes y los tacones en el suelo. Parece que vaya a comerme el mundo, y realmente sólo quiero encontrarte por casualidad. Tengo una sonrisa de niña para que me veas dulce, tengo los ojos brillantes para que en ellos encuentres luz. Tengo una botella en la mano por si la cosa se nos va, el pelo suelto para que me veas segura, dos pendientes porque también soy cuidadosa y los tacones para que me veas en este mundo de gigantes. Nunca te fíes del galán o del malo. Ni de la pasota, ni de la tímida. Pero es que son los que más ponen. Si eres un tío, sedúcela con palabras vacías pero a los que ella dará otro significado, o trátala fatal, le gustarás. Si eres una tía, úsalo como una almohada y luego pasa de él, o ve de tímida y luego conviértete en la más zorra de la putas, le pondrás. Pero... escucha una cosa. Si eres un tío, y eres así, les gustarás a las pasotas, y a las tímidas que luego no lo son. Si eres una tía y eres así, les gustarás a los malos, o a los príncipes que en realidad son unos salidos con ganas de un calentón.

Vive.

¿Cuántas veces has reído hasta llorar? ¿Cuántas veces te has quedado sin aliento? ¿Cuántas veces has sonreído delante de la pantalla como un gilipollas? ¿Cuántas veces te has caído, pero cuántas te has levantado? Que de qué nos sirve ponerle mala cara al tiempo, si por ello no va a cambiar. De qué nos sirve tenerle miedo al amor si vamos a acabar cayendo. Equivócate, caete, levántate con la mejor de tus sonrisas y grítale al mundo. ¿El qué tienes que gritarle? No lo sé. Eso lo sabrás tú. Sonríe cuando todos estén mal, y cuando no comprendas un chiste. Sácale la lengua al que haya intentado joderte, y al que te prohíba algo. Que si quieres pasar donde ponga prohibido el paso, pues pasa. Sí, seguramente luego veas que no ha sido la mejor opción pero, ¡Qué mas da! Has hecho lo que querías, no lo que debías. Confunde a tu jefe de estudios con un chino con carrito de la compra (Lo he hecho), y deja que tus amigos se descojonen vivos cuando grites su nombre, porque no te crees que sea un chino con carrito de la compra incluído. Da vueltas alrededor de una piedra, que te vea quien quiera, porque el problema es suyo, no tuyo. Apuéstate algo con alguien y cuando vayas a perder, grita ¡Trampa! sin ningún motivo y con una sonrisa de oreja a oreja. Di cosas sin sentido con tus mejores amigas a las 2 de la mañana, y deja que los demás flipen con ello. Saluda cuando alguien te mire. Cámbiate de acera cuando veas a alguien con el que no quieres cruzarte, pero hazlo a los descarado, que sino no tiene gracia. Quédate despierto hasta la madrugada a la espera de alguien, y vete a dormir sin haber hablado con esa persona. Rómpete los pies con los tacones y 2 horas caminando. Juega, salta, canta. Ríe. Vive.

Me quiero morir si veo tristeza en tu sonrisa*

Acostumbrada a ser la que más se ve pero no la chica perfecta, la que todo el mundo conoce pero no por la que suspiran, no soy la que va detrás pero sí la que tropieza. También soy esa a la que ven como la imposible, aquella que no se deja engañar por nadie y con la que no puedes jugar. No se me ve como un reto, se me ve como un caso perdido. Pero no es así... sólo soy difícil, y fácil a la vez. Eso tampoco significa que no sienta nada. Simplemente busco a aquel que me haga sentir bien. No busco uno que se quede toda la noche despierto si estoy enferma, pero sí alguna llamada, alguna palabra de apoyo. No busco que me diga que dejaría a todo el mundo por mí, pero sí palabras como 'princesa'. No busco que se pegue con medio mundo, quizás sí que busque que me haga sentir protegida. Si lo miras desde mi punto de vista, no es nada del otro mundo lo que yo pido. Aunque, para qué mentir. Todo eso sólo son complementos. Lo único que verdaderamente busco... es que me quiera, que no busque algo que en mí no va a encontrar.
~Sigues siendo el primer pensamiento al despertar.

7346*

Soy fácil de enamorar, difícil de que lo admita. Pediré perdón a la cara y mirando a los ojos si tienes razón, sino, ya te lo puedes currar, porque tengo el orgullo en la cima... Te sacaré de cualquier apuro, seguramente me pondré en medio y te levantaré de las caídas, pero no esperes que me arrastre por ti. Tampoco me verás llorar por tu culpa, si lo hago, que lo haré, será a escondidas y cuando piense que nadie me escucha. Sonrío de mil maneras distintas, pero debajo de mi piel solo hay dagas y heridas de muerte. No sé canalizar bien el dolor, así que lo cubro con cicatrices mal cicatrizadas, que se romperán haciéndome caer en el más vacío abismo. Me duelen tantas cosas, tengo tantas cosas negras en mí, que no sé cómo curarme, si es que existe cura. Jamás me creas cuando te diga que estoy bien, porque no lo estoy. No pido ayudar, porque no creo que nadie me pueda ayudar. Siento que una lágrima arde en mi mejilla, y sólo puedo pedirme perdón a mí misma, por todo lo que me hago pasar...

Cada vez que sonríes sin hablar.

-Es borde, idiota, egoísta y creído...
+Y pese a todo, le quieres.
-No puedes saberlo.
+Pero lo sé. Lo sé cada vez que miras de reojo, cada vez que sonríes al hablarle, cambiando inmediatamente la sonrisa por una mueca de dolor para que no se note, cada vez que oyes su nombre y miras al infinito...
-Qué debería hacer?
+Buscarte otro.
-Por qué?
+Lo ves? te importa. Si no te importara, me dirías que no tienes que buscarte otro porque no es nada...

Escápate de mi cabeza.

Me conecto, busco tu nombre entre los conectados y, al ver que no estás, suspiro. Empiezo a pensar que esto ya es rutina, siempre igual, siempre buscando el mismo nombre, siempre suspirando. Alzo la cabeza al techo y me sumo en los más profundos pensamientos, pensando de mil maneras diferentes cómo te saludaré hoy, si es que hablo contigo, cómo iras vestido, si te percatarás de mi presencia siquiera. Suena aquel pitido martilleante de cuando alguien te habla. Cruzo los dedos, pero no tengo valor de ver si eres tú. Por mi cabeza pasan mil imágenes de ti antes de mirar, a la velocidad de la luz. Me armo de valor, y abro la ventana. No reconozco la foto, así que cierro los ojos. No es él, pienso. Una lágrima se asoma por mi ojo, todavía cerrado. A medida que va rodando por mi mejilla va dejando un rastro negro detrás. Cualquiera diría que se me ha vuelto a correr la raya, como siempre que pienso en tí, pero yo sé que no es eso. Mis lágrimas se visten de luto, de dolor, de miedo, de negro. El pitido continúa, impaciente a que conteste. ¿No quieres hablar conmigo? me escriben. Me dispongo a contestar, cuando mis ojos se posan en el nombre de la persona. Resulta que sí que es, simplemente se ha cambiado de foto. Casi puedo ver su sonrisa a través del ordenador. Querría contestarle, decirle todo lo que me pasa, pero no puedo. Mi cerebro se ha bloqeado, mis manos no quieren moverse. Mi corazón me ruega que saque fuerzas para contestar. Pero no puedo, no debo, no quiero. Te quiero. siguen escribiendo. Mi corazón estalla, va a mil por hora, o quizás más, no sé. Mi cerebro despierta con un estridente 'no'. No lo hagas, no caigas. Es una máscara, sólo busca hacer daño. Pero mi corazón continúa rogándome que conteste mientras llora desconsoladamente. Te has desconectado, me aparece una ventana del ordenador. Sí, lo he hecho. Me he desconectado, no me he visto con fuerzas de contestarle.

Pagar dinero por un cacho de felicidad.

Debían de ser alrededor de las tres de la mañana. Había sido un sábado bestial. Lleno de luces, risas, fiesta y más fiesta. Los jóvenes apenan recordaban nada, las farolas estaban apagadas. El humo del cigarro todavía se respiraba por las calles. Apenas se tenían en pie, y se reían de forma casi diabólica. Iban cantando algo. Pero había alguien, entre aquella multitud, que no se reía, que no cantaba. Me acerqué a verla mejor. La raya se le había corrido a causa de las lágrimas y parecía el burdo maquillaje de un payaso. Tenía los ojos rojos y la mirada perdida. Antaño podría haber sido una joven perfectamente normal, hoy no lo era. 'Por qué lloras?' le pregunté, y ella me envió un cruel reflejo de lo que el amor es capaz de hacer. Movía la boca al mismo compás que yo, como intentando decirme algo. '¿Esto te lo ha hecho el amor?' volví a intentar entablar conversacion con ella. No asintió, pero su dura imagen daba a entender que sí. El amor... qué duro, qué capullo puede llegar a ser, haciéndote morir por dentro. Pobre chica, daba verdadera pena. Las botellas de vodka vacías decoraban las suelas callejuelas. Todos los jóvenes comenzaron a despertar de su feliz estancia mientras se alejaban hacia sus casas. Uno de ellos paró, delante de la chica de ojos rojos. La miró con cara de pena y se fue moviendo la cabeza de un lado a otro. Observé mejor a la joven, y pude ver los rastros de cuando alguien había sonreído mucho antes. Pobrecita, pensé. De pronto, se me cayó el mundo encima. Entendí de golpe por qué la joven no me hablaba, ni siquiera me ayudaba a entender qué era lo sucecido, por qué sólo me miraba con cara de pena mientras movía sus labios al compás de los míos.
Aquel espejo me dio un golpe bajo mientras me enviaba aquel cruel reflejo.