viernes, 29 de abril de 2011

Yo ya estoy cansada de sufrir por amor-

Me he caído, sí, yo, esa que parecía que nunca lo hacia, estoy hundida en un mar sin fondo, me tiré del precipicio y cai, volé volé por lo que al caer el golpe fue más fuerte. Me muero por dentro y lloro sin lágrimas, porque has vuelto a hacerlo, has vuelto a hacerme daño y no te arrepientes, te has propuesto joderme la vida y lo estás consiguiendo. Pero también sé que no vivo por lamentos, así que me levantaré, de alguna manera, no sé como, no sé qué hare cuando te vuelva a ver, me gustaría chillarte, llorarte, darte en ese corazón tuyo que un día dijiste que era mio. Pues bien, reclamo lo que es mio, reclamo por lo que ahora lloro. Aunque en realidad no puedo reclamar nada, porque el corazón que busco tú no lo tienes, no puede tenerlo alguien que solo sabe enamorar para atacar. No sé vosotros, pero yo ya estoy cansada de sufrir por amor, de llorar por gilipollas, de echarme la culpa de algo que obviamente no tengo la culpa, la culpa es de él por creer que me quiere y dejarme como un juguete que ya nadie quiere. Y sí, he querido, he deseado que tus palabras fueran ciertas, aunque fuera una de ellas, pero todas se han caido con mi cuerpo por mi precipicio, porque eran mentira, todo mentira. Me lo dicen todos, que desde hace un tiempo estoy más depresiva, más tímida, que me estás haciendo daño, que no me quieres, y es que me duele escuchar todo eso, pero es que las verdades duelen... Y yo no quise creerlas, y aquí estoy.

sábado, 23 de abril de 2011

El tiempo pondrá a cada cual en su lugar.

Entre gilipollas que se enfadan por cualquier cosa, putones que están desesperados y falsos que dicen decir las cosas a la cara yo empiezo a pensar que tenéis más cara que espalda. Que sí que me da igual lo que digáis, pero que metéis mas puñaladas que respiráis, y sino montáis pollos por cualquier chorrada, y sino rompéis corazones así por las buenas. ¿Que yo soy mala? No, soy realista, mi cuerpo está harto de balas de perdigón apuntando a matar, mi cabeza está harta de rayadas que os metéis solos y mi corazón harto de sufrir por idiotas. Pero, ¿sabéis qué? El tiempo pondrá a cada cual en su lugar.

miércoles, 20 de abril de 2011

O s o d i o .

No tengo ganas de pensar, no tengo ganas de escribir, solo quiero desconectar, olvidar, uno me utiliza y otro intenta hacerme callar. Sois lo peor...

martes, 19 de abril de 2011

Soy tan fácil

No sé si ya es costumbre, pero siempre que me conecto miro a ver si estás. Escribo estas líneas desde lo más hondo de mi corazón y mis lágrimas, rodantes por mis mejillas en estos instantes. ¡Por qué es todo tan difícil? ¿Por qué no puedes ser como los demás? Soy tan fácil, ¿Por qué no lo aprovechas? ¿Por qué? Lo daría todo por ti, ¿sabes? Eres el único capaz de hacerme sentir tan ridícula... cuando te hablo y no contestas, cuando te pregunto algo y me esquivas, cuando busco tu mirada y tú la apartas... Soy lo que necesitas, ¿entiendes? Intento hacer de ti alguien mejor, porque no es la que más te quiere la que te coje tal y como eres, sino la que intenta cambiar tus más sucios vicios para que seas mejor, y ésa soy yo, aunque me ignores, me evites y me hagas sentir como la más pequeña de las hormigas. Te quiero, ¿no lo ves? Pero no soy capaz de demostrártelo, aunque de verdad que estoy deseándolo, pero me sentará tan mal esa negativa niño, que prefiero joder mi corazón a la larga que todo de golpe. Y es increíble lo tonta que soy contigo, como llego a pensar que tengo alguna posibilidad cuando me hablas, como llego a pensar que verdaderamente te importo algo. Luego llega la caída, veo un comentario, una foto, un estado... de una puta, porque eso es para mi, que te dice te quiero, le dices yo también a ti, y me caigo al más profundo abismo, porque ella jamás le dará tanto significado como le daría yo. Que las lágrimas siguen cayendo amor, cuando pienso que si no me contestas es porque tienes una puta más importante a la qe hablar... pero te quiero tanto. Y te juro que si me pidieras que te baje una estrella del cielo, yo te traería un espejo, porque no hay nada tan bonito como tu reflejo...

lunes, 18 de abril de 2011

He sido princesa de Disney sin príncipe.

Me siento... como la protagonista de un cuento infantil que nadie quiere. He sido la lechera que llevaba una jarra de leche en su cabeza, que por el camino pensaba en todo lo que haría con él y cómo se volvería rica, para que luego se le caiga la jarra y todos sus sueños se rompieran de un plumazo, solo que cambia la leche por tu amor. He sido Cenicienta, te he hecho sentir lo que nunca en aquel baile pero, cuando se me cayó el zapatito tú no viniste a buscarme, te fuiste con otra. He sido Blancanieves, inocente al comerme la manzana, sólo que tú llegaste tarde para despertarme y ahora ya no sé distinguir el sueño de la realidad. He sido Pedro de Pedro y el Lobo, tantas veces he creído amar, que ahora que verdaderamente lo siento nadie me cree. He sido la Sirenita, acepté un trato amañado para estar más cerca de ti y luego acabar perdiendo yo. He sido idiota, inocente, ilusa, he creído que cada vez que me mirabas era porque sentías algo, he creído que de verdad podía pasar algo entre nosotros, me he dejado caer en tus brazos para que te apartaras y así caer en el abismo. Te he pensado tantas veces, que ya perdí la cuenta.

sábado, 16 de abril de 2011

Te quiero a ti, a tu forma descarada de ser, a tus malos vicios y eso tan tuyo que me gusta

¿Sabes qué oí ayer? Que si escribes un deseo en un papel, lo rompes en cachitos y lo tiras al río, se cumple. Sin embargo, el río no es lo suficientemente grande para pedir todo lo que me gustaría... ya que, por pedir, pediría darnos tantos besos como estrellas salgan hoy. Pediría una noche a tu lado en Groenlandia, de esas que duran 6 meses. Pediría que tu sonrisa me despertara cada mañana, seguido de un Vamos hoy a comernos el mundo hasta quedarnos llenos. Pediría que me cogieras por detrás y me abrazaras, que me tocaras el pelo seguido de una frase que dijera lo bonita que me encuentras hoy. Pediría que vinieras a buscarme en un corcel blanco, con una anillo en la mano y con una rosa roja y que... STOP. PARA. Todo esto es mentira. Yo no pediría todo esto. Yo no pediría darnos tantos besos como estrellas salgan hoy, yo pediría superar a las estrellas. Yo no pediría una noche a tu lado, aunque fuera en Groenlandia, ¡yo pido una vida entera a tu lado! Yo no pediría que tu sonrisa me despertara cada mañana, ni seguido de ninguna frase, yo prefiero que me des las buenas noches con un beso, porque por la mañana estoy demasiado dormida como para darle toda la importancia que tiene tu sonrisa. Y bueno la frasecita sobra, creo yo. Yo no pediría que me cogieras por detrás y me abrazaras, ni me tocaras el pelo ni me dijeras nada, porque si me tienes que coger y abrazar significa que me has soltado antes, y yo no quiero que me sueltes nunca, no quiero que me toques el pelo ni me digas nada, porque estarías demasiado ocupado dándome un beso de película como para hacer nada más. Y yo no pediría que vinieras en corcel blanco con una rosa roja, ¡Qué cojones dices! A mi me vienes a buscar en skate, o en bici me da igual, yo no quiero un anillo en tu mano, quiero tu típico cigarro, que es malo pero yo me enamoré de quien eres con tus vicios incluidos, y tampoco quiero una rosa roja, quiero que me susurres que esto es para siempre, que las rosas se marchitan como el amor de los galanes. Te quiero a ti, a tu forma descarada y maleducada de ser, a tus malos vicios y a eso tan tuyo que me hace llegar a lo más alto del cielo, porque solo tú sabes qué palabras decirme.
Niña de papá ama a niño de la calle'

jueves, 14 de abril de 2011

¿Estamos tontos?

A lo largo de mi vida pequeñas notas se han ido pegando en mi alma, dándome normas sobre cómo vivir. Hoy quiero compartirlos...
Norma número 3- Vive rápido y no pienses lo que haces, sólo te traerá paranoias sin sentido.
Norma número 7- Ama a todos y cada uno de los tíos cabrones que encuentres, total, ¡Lo harás aunque no quieras! ¿Por qué no hacerlo queriendo?
Norma número 13- Si se te antoja algo, cógelo. 
Norma número 17- Sé humilde pero sé egoísta. Mejor serlo que quedarte sin nada.
Norma número 19- Comete errores, pero prométeme que te levantarás lo más rápido posible.
Norma número 21- Ten todo lo que veas, el más rápido gana.
Norma número 22- Explota al máximo tu energía, el aburrido es el que pierde en este mundo de gigantes.
Norma número 23- Quiere lo que no tengas o hayas perdido. Es ley de vida.
Norma número 24- Únete al que veas reír sin parar, la risa alarga la vida, hazte inmortal.
Norma número 25- Imagina tu mundo de colores y llora al despertar. La vida no es vida sin lágrimas sucias.
Norma número 26- Enfádate con medio mundo y después sonrieles. Odio ser bipolar, es fantástico.
Norma número 27- Ríete cuando alguien se caiga pero no de los complejos, ellos harían lo mismo.
Norma número 28- Obliga a tu cabeza a hacer caso al corazón. Éste es el que te hace vivir.
Norma número 32- Lo que no mata, te hace más fuerte.
Norma número 36- Lo de arriba es mentira. Lo que no mata engorda o es caro.
Norma número 40- No te arrepientas de nada, quizás hayas conseguido con eso algo mejor.
Norma número 44- Parecías tonto, pero eres gilipollas. Recuérdamelo siempre que hables conmigo.
Norma número 47- Disfruta de los pequeños detalles y de las cosas bonitas, quién sabe cuando volverás a oírlas.
Norma número 49- No te fíes de nadie ni sigas a nadie. Sé libre. ¿Para qué seguir al rebaño pudiendo ser cabra solitaria?
Norma número 50- Ámame como yo te amo a ti.
-Lee la primera letra de cada norma de la 21 a la 28, éstas incluidas, y juntalas formando una palabra. Me gustaría que me dijeras eso.-

miércoles, 13 de abril de 2011

Estás pensando en montarte en esa montaña rusa... conmigo.

-Mira esa montaña rusa... tiene pinta de ser alucinante.
+Tengo mariposas en el estómago.
-¡Por favor! Has hecho cosas mucho peores. Además, me dijiste que querías hacer paracaidismo.
+Es cierto.
-¿Entonces cómo te va a dar miedo?
+A mí no me da miedo... Creo que mas interpretado mal. Yo no tengo mariposas en el estómago por ver la montaña rusa, las tengo por estar a tu lado... Siempre que apareces con esa sonrisa de suficiencia, siempre que me miras y apartas la vista confuso, siempre que intentas hacerte notar delante mío, siempre que te percatas de mi presencia.
-Ah, entiendo... entonces yo tengo un ecosistema entero en mi estómago.
+¡No seas tonto! Tu también querías hacer paracaidismo.
-Tu también me malinterpretas... Tengo un ecosistema entero no por la montaña rusa, sino por la morena que tenemos delante.
+Gilipollas.
-¡Es broma, no te enfades! En realidad este ecosistema dentro de mí se debe solo a ti. Cada vez que apareces y piensas que mis sonrisas van por ti (si que van por ti pero eso tú no lo sabías, doña creída), cada vez que te miro, me miras y me obligas a apartar la vista derrotado, cada vez que te das cuenta que intento hacerme notar delante tuyo, cada vez que noto que sonríes al hablarte.
+Tú sí que eres creído, y un idiota...
-Probablemente, pero si soy idiota es por tantas cosas que tengo en la cabeza, ¿sabes? Por ejemplo, ahora mismo aparte de hablar estoy pensando en montarme en esa montaña rusa.
+Te has olvidado de una cosa.
-¿De qué?
+Estás pensando en montarte en esa montaña rusa... conmigo.

lunes, 11 de abril de 2011

Me muero cuando llega el día y me ignoras.

No sabes lo importante que es para mí cuando me miras y te ríes sin motivo, cuando me preguntas si estoy enfadada, cuando te acercas a mí cuando estoy mal y me haces sonreír. Pero no sabes cómo me gustaría lanzarte algunas veces una lámpara a la cabeza, cómo me gustaría gritarte cuatro cosas por lo inmaduro que eres, cómo me gustaría tirarte al suelo al cigarro que estás a punto de fumar. Y es que no sabes que me muero porque llegue el día de verte, y me muero cuando llega ese día y me ignoras. He intentado hacerme notar de todas las formas posibles, he intentado que te des cuenta que quiero estar a tu lado, he intentado todo lo que se te ocurra... pero nunca da nada resultado, siempre tienes tiempo para todas, menos para mí. Y me duele tanto aquí, más arriba del estómago, entre los pulmones... porque ahí debería haber algo funcionando, pero se fue cuando entraste en mi vida, y desde entonces siento un vacío que sólo se llena cuando estás tú. Rezo cada noche porque mañana me mires, sonrío al hablar contigo, vuelo cuando pienso en ti, y es que no sabes que mi felicidad depende un poquito de ti...
-SC.

domingo, 10 de abril de 2011

Me duelen tanto tus mentiras que ya creo que me gustan.

Salgo a la calle vestida de princesa, con el pelo bien peinado y sonrisa de película. Los tacones me hacen grande en este mundo de gigantes, los pendientes más grandes que he encontrado tintinean suavemente contra mi buen humor. Paso una tarde perfecta al lado de la gente que quiero, sonrío, hago locuras y vivo al límite. Pero yo no me siento así niña... Llego a casa mientras tiro al infinito mi sonrisa de cristal, me tumbo en la cama, me pongo a llorar. Yo no soy feliz y hace tiempo que no lo soy, pero la gente piensa que sí, la gente me ve como una persona fuerte que no se cae nunca, y esa es la reputación que me gusta tener, aunque realmente me duelan tus comentarios punzantes, cuando fardas de cuántas tías te vas a tirar hoy, cuando te digo que soy feliz viéndote feliz y realmente lo que quiero es que seas feliz junto a mí... No puedo evitar chillar de rabia, veo borroso a causa de las lágrimas que nublan lo que antes era mi supuesto buen humor. Entre gritos y lágrimas consigo ver un folio en blanco que a la vez tiene escritas todas las promesas que me hice. No pensarás más en él. No desearás que llegue el día de verlo de nuevo. No creerás que cuando dice que está enamorado habla de ti. No mirarás su cálida sonrisa a escondidas. No sonreirás al verlo aparecer ni al escuchar su voz. Y pese a todas las promesas que me sigo haciendo, Sigo pensando en él, sigo deseando que llegue el día de verlo de nuevo, sigo creyendo que cuando dice que está enamorado va por mi, sigo mirando su cálida sonrisa a escondidas, sigo sonriendo al verlo aparecer  o al escuchar su voz.

viernes, 8 de abril de 2011

Me faltan fuerzas para odiarte.

Es viernes por la noche, las luces encendidas, el cielo estrellado, enamorados en un banco y desesperados en una esquina. Puede verse el humo de un cigarro tan consumido como mi vida en un balcón lleno de malos pensamientos, las cenizas caen sobre sueños rotos, las lágrimas amargas caen sobre un sólo contacto del móvil, aquel al que llevo esperando todo el día. Tacones preciosos y un par de pendientes carísimos tirados por el suelo de la habitación, restos de maquillaje de Chanel por el lavabo y una minifalda de escándalo mal colocada en la cama. No, no es que haya ido a una fiesta. Tampoco en una discoteca. Todo esto era para ti, para tu sonrisa, para tu mirada de niño que hoy no he vuelto a ver... He salido a la calle vestida como una princesa por si te podía encontrar por casualidad, ya que mi móvil sólo ha sonado una vez hoy. Como entenderás he ido corriendo a cogerlo, casi me tropiezo por el pasillo de la emoción. He leído de quien era... de mi compañía de móvil, me recargan el saldo. Genial, perfecto. Así que lo he decidido, he salido a calle, he pasado como alma en pena por tu casa, tu campo de fútbol, por donde quedas con tus amigos... no estabas. Pero se me ocurrió la fatal idea de buscar en tu parque favorito. Ahí estabas tú, tan perfecto como siempre, con otra chica... Mis lágrimas saltan sólo de recordarte con ella. Nunca te querrá como yo. Lo sabes tú y lo sé yo, pero hoy has decidido dejarme plantada por ella. Las luces se apagan, el cielo se enciende, el reloj marca la madrugada. Pero en mi cabeza ya no pasa el tiempo, porque se ha detenido en esa imagen, siempre esa imagen.
Me dijiste que yo era la única, ¿Sabes? Debería odiarte, debería querer clavarte un boli en la yugular, pero ¿Sabes? Te quiero demasiado como para odiarte. Hay más recuerdos malos que buenos, me has hecho mas daño que bien, y pese a todo... te quiero como eres, te quiero en mi vida, dejaría que me hicieses daño una y otra vez si con ello te tuviera un segundo conmigo...

jueves, 7 de abril de 2011

Revuelos de pensamientos sin sentido, sin emoción.

A toda ostia, a 300km/h, mi cabeza gira, la música truena y mi vida se consume más rápida que una vela junto al sol. Salto, vivo, río y me tiro al vacío, vuelvo al camino, me subo a las estrellas, me tiro de cabeza. Salgo a la calle, me estampo contra el duro suelo y me parto los dientes de dos en dos, mientras un turista me graba al otro lado de la acera, le saludo con la mano y me voy en tren dirección perdida, buscando los cachitos de sueños esparcidos por el mundo, como las cenizas de mi última vida. Un billete a la calle de las piruletas por favor, donde todo es posible y no tengo que fingir esta puta sonrisa que no quiero tener pero la tengo por fingir, por aparentar lo que no soy. Escribo esta entrada con todo mi odio, dolor y locura de mis arterias, ahora secas y vacías debido a que toda la sangre está reunida en mi corazón tapando esa herida que no para de sangrar. No soy capaz de recordar que la vida y la realidad son sinónimos de asco, llaman a mi teléfono pero, no lo cojo, ¿por qué? Porque no espero a nadie hoy, echo a correr por la ventana aunque nadie me sigue, hablo con las paredes que dicen que lo oyen todo. Y sale la luna mientras los bebidos la aúllan, y sale el sol mientras los mismos se sientan en su pupitre a la espera del sábado noche. Fiebre, fiesta y ruido, fenómeno imperdible, todos viendo doble mientras yo veo una única sombra, a la velocidad de las estrellas. Es alto, pelo y ojos castaños, va en skate y lleva el escudo de su equipo de fútbol grabado en su piel, que no es el Real Madrid o el FC Barcelona, sino el suyo propio, el que juega con carne y fuego para luego merecer una áspera derrota. Lleva una sonrisa de papel pegada a su boca, el pelo corto en ocasiones terminado en cresta, para aquellos ignorantes un tipo normal, para mí el protagonista de mis sueños. Te acercas mientras se te cae la sonrisa de papel, me miras, y me hundes en un sentimiento nuevo, lleno de celos y amor, receta de dolor y alegría.

miércoles, 6 de abril de 2011

Vodka de mil colores distintos.

Hoy no me apetece sonreir, no me apetece ser sincera, no me apetece jugar, sólo quiero tumbarme en mi cama, alejarme de todo y todos y poner la música hasta quedarme sorda. Lo inevitable tiene que pasar, hoy ha pasado... Pero a mí nadie me hunde, ¿entiendes? Voy a seguir aquí niño, beberé unos tragos de más del vodka rojo, blanco, negro, azul, verde, me da igual el color del que lo llames, miraré a los ojos al sol, lloraré un rato y volveré a la calle, donde me espera la gente que nunca me fallará, o eso digo ahora pero, me da igual ahora mismo. No sé si sonreiré o no, pero con el tiempo lo haré, ya lo verás, y conoceré a mi príncipe azul, no a un gilipollas esférico (porque es gilipollas mires por donde mires) de esos de Ahora me gustas, ahora no, ahora te hablo, ahora eres una pesada, ahora no pienso nada. Suena un cacho de la canción que tantos momentos vivió, que tantas sonrisas me trajo, que tantas mejillas sonrojadas me hizo tener. Sigo tendida en mi cama escuchando rock a todo volumen, los pies apoyados en la pared, la mirada perdida y ese corazón envuelto el llamas. He escrito tu nombre de mil formas distintas, me lo he tatuado en el corazón, he ahorcado las mentiras y le he dado un vuelvo a la razón... todo por ti, aunque tú ahora estás detrás de esa cría que no te dará ni la mitad que te hubiera dado yo. Mis lágrimas no se distinguen en mi vaso, repleto hasta el borde de alcohol, dispuesta a curar mis heridas con morfina y a pincharme adrenalina hasta morir. Me cuesta tanto pensar en alguien que no seas tú...

sábado, 2 de abril de 2011

We are who we are.

Qué quieres que te diga... me encanta la música House, o Electro, como quieras llamarla, porque me martillea la cabeza hasta no dejar hueco a mis pensamientos, por lo que siempre me veras con la Máxima FM puesta a todo volumen. Me gustan las películas de miedo, que te enganchan desde el primer minuto hasta el final, y no te deja pensar, por lo que me encontrarás enganchada a cualquiera de ese tipo. Me pierde el andar como si tuviera prisa, sin fijarme lo que tengo alrededor ni mirar atrás, y no aguanto ir despacio, por lo que siempre me verás salir la última de casa y llegar la primera. Hablo rápido, en ocasiones demasiado, a veces ni vocalizo, porque no me gusta perder ni un segundo de mi vida. Si quieres tenerme, hazlo rápido, dime unas cuantas palabras bonitas, y lánzate, no pierdes nada, porque cambio de opinión cada dos minutos. No me va demasiado la televisión, soy más de engancharme a internet, porque la televisión me deja demasiados ratos libres en mi cabeza. Soy impulsiva y para nada racional, vivo todo lo que puedo y más, odio pararme a pensar las cosas dos veces, ahora entenderás por qué la música house o las pelis de miedo, quienes no te dejan espacio para nada más. Conmigo te divertirás lo que no sabías, vivirás de verdad, puedo darte lo que los demás no saben, puedo darte el vivir sin pensar, puedo darte el vivir por impulsos. Que si se me antoja algo lo cojo, puedo enseñarte a hacer lo mismo, también te enseñaré a no pensar, a ser feliz, porque es más feliz el ignorante que el sabio, te lo aseguro.
Ponme una canción de David Guetta, caeme bien, dame un tema del que hablar, salúdame con un 'qué pasa, princesa?' y disfruta de lo que soy capaz.